Ya sea en tren, coche o avión, las mejores historias siempre se tejen en los viajes. Son el caldo de cultivo de anécdotas que repetimos año tras año. Por eso, a pesar de las agendas apretadas, siempre hay tiempo para ese viaje con amigas. Este recorrido se adentra en algunas de las ciudades europeas más encantadoras, pero sin caer en los tópicos.
Lisboa, Portugal
La capital lusa está en auge, no solo por su gastronomía y diseño, sino también por su estilo. Lisboa es ideal para un plan con amigas: brunch en el tea room Oui Mais Non, cócteles en el bar de Rocco o vistas desde el rooftop de Sud Lisboa. Para amantes de la moda y decoración, direcciones como Benamor, Claus Porto, Cerámicas na Linha o Stró son paradas imprescindibles.
Nápoles, Italia
Nápoles, con su anarquía encantadora, difiere de otras ciudades italianas. Aquí se disfruta de carbohidratos sin límite y se establece una relación con la pizza, como nos enseñó Julia Roberts en «Come, Reza, Ama». La pizza napoletana tiene su templo en Pizzeria Da Michele, y para el postre, sfogliatella en Attanasio o helado de pistacho en Casa Infante.
Dubrovnik, Croacia
La ciudad croata, famosa por su rol en «Juego de Tronos», es un destino clave, no solo en verano. El casco antiguo alberga monumentos como el palacio Sponza o la Iglesia de San Ignacio. Las murallas ofrecen vistas espectaculares del Adriático y playas privadas accesibles para sentirse exclusivo.
Aquisgrán, Alemania
Entre Bélgica y los Países Bajos, esta ciudad medieval alberga la Catedral, el ayuntamiento y manantiales con aguas templadas y sulfurosas. Perfecta para relajarse en Las Termas Carolus de Aquisgrán y disfrutar de los mercados navideños en invierno.
Budapest, Hungría
Buda y Pest, una unión legendaria, dan vida a una de las ciudades más hermosas en el Danubio. Monumentos como la Basílica de San Esteban, Baños Széchenyi y cafés históricos como el New York Café son imperdibles.
Estocolmo, Suecia
La «Venecia del Norte» cautiva con sus catorce islas. Calles de Gamla Stan, comida en Racamaca o brunch en Gast Café y Poom & Flora son paradas ideales. Las tiendas locales y sostenibles como Grandpa, Nitty Gritty o Esteriör Shop son un tesoro.
Gdansk, Polonia
La ciudad portuaria en el Báltico, aunque menos reconocida que otras ciudades polacas, deslumbra con su casco antiguo y su historia. No hay que perderse los famosos Pierogi y las calles adoquinadas.
Estambul, Turquía
Una ciudad vibrante que fusiona dos continentes, ofreciendo una rica gastronomía desde kebabs hasta pescados en Karaköy. Lugares emblemáticos como la Mezquita Azul, Santa Sofía o los palacios imperiales hacen de Estambul un destino único.
En cada ciudad europea se entretejen experiencias y sabores inolvidables, perfectos para compartir con amigas y crear recuerdos invaluables. El encanto de estas urbes se plasma en sus monumentos, la diversidad de sus platos típicos y sus vibrantes escenarios urbanos, todo ideal para una aventura única.