Este 2021, y por segundo año consecutivo, no se elevarán los vasos de cerveza para brindar en la Oktoberfest de Múnich, la fiesta popular más grande de Alemania y de las más importantes del mundo. La razón, al igual que en 2020, se debe a la cantidad de casos de COVID-19.
«No fue una decisión fácil, pero tengo que tomarla y ya lo he hecho«, declaró el alcalde de Múnich, Dieter Reiter, el pasado lunes, 4 de Mayo, explicando que la razón se debe a cuestiones de salud y seguridad como prioridades. «Es por eso que este año tampoco habrá Wiesn en Múnich«.
Si bien la Unión Europea está analizando la posibilidad de permitir el ingreso de turistas que no residan en Europa, Reiter advirtió que la pandemia aún no ha terminado.
«El riesgo de que las personas podrían venir e infectarse con coronavirus aquí es simplemente muy grande«, agregó, reconociendo también el impacto que la no celebración de esta fiesta popular también tiene un impacto económico. «Pero Oktoberfest solo puede realizarse completamente o no realizarse«, dijo.
La Oktoberfest de este 2021 se iba a realizar desde el 18 de Septiembre hasta el 3 de Octubre, sin embargo y aunque aún falten varios meses, la medida de la cancelación fue apoyada por el ministro presidente de Baviera, Markus Söder, por lo que fue de forma unánime. Según explicaron, esto se debió a tres razones.
«Primero: la situación es demasiado incierta. Tenemos una obligación económica aquí – una cancelación tardía de Oktoberfest sería una pérdida económica«, explicó Söder en conferencia de prensa.
Las otras dos razones están relacionadas al miedo de dañar la marca Oktoberfest y potencialmente «condiciones caóticas» por la obligatoriedad de utilizar mascarilla/tapabocas y el requerimiento de distancia social.
En épocas previas a la pandemia, Oktoberfest solía atraer a unas 6 millones de personas de todo el mundo para disfrutar y celebrar de manera única. Pero teniendo en cuenta que Alemania está atravesando una tercera oleada de contagios de COVID-19, con una tasa de infección de 146,9 nuevos contagios semanales por cada 100.000 habitantes, llevar adelante el festival implicaría un peligro par ala comunidad.
«Oktoberfest se volverá a celebrar y volverá a ser grande«, aseguró Söder.