París inauguró una sala de cine flotante en donde la gente puede ver desde barcos socialmente distantes llegará al río Sena en París la próxima semana.
El “Cinéma sur l’Eau”, o cine en el agua, se llevó a cabo el 18 de julio para celebrar el inicio de Paris Plages, un programa anual administrado por la ciudad que crea playas temporales en la capital francesa durante el verano.
Los aficionados al cine pudieron disfrutar de la proyección gratuita desde la comodidad de 38 embarcaciones eléctricas que pueden albergar de dos a seis personas cada una, con prácticas de distanciamiento social para asegurarse de que las personas a bordo sean familiares o amigos.
Se proyectaron dos películas en la pantalla grande, incluida “A Corona Story”, un cortometraje sobre la pandemia que ganó un concurso lanzado por la cadena de cine Mk2, que también organiza la proyección del agua en colaboración con Häagen-Daz.
La segunda película es “Le Grand Bain”, una comedia francesa de 2018 sobre un grupo de hombres que comienzan un equipo de natación sincronizada.
Recordemos que los cines en Francia pudieron reabrir a fines del mes pasado con una capacidad del 50 por ciento después del cierre debido a la pandemia.
Lo cierto es que en medio de la pandemia, muchos están utilizando su creatividad para volver a una cierta normalidad, y el cine no se ha hecho esperar. Al igual que en París, en el aeropuerto de Vilnius, en Lituania, aprovecharon el estacionamiento ocioso para convertirlo en una sala de auto-cine.
El aeropuerto de Vilnius acogió 160 vehículos para una noche de cine drive-in, lo que permitió a las personas reunirse y ver la película ganadora del Oscar, Parasite.