Península Mitre, en Tierra del Fuego, es el mayor punto de captura de carbono de Argentina y uno de los pocos ecosistemas del mundo que aún no se ha visto impactado por el hombre. Se trata de un territorio ubicado en el sureste de la isla Grande de Tierra del Fuego, perteneciente al Departamento Ushuaia de la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur. Allí, hace 32 años que la iniciativa para proteger este lugar es impulsada por su comunidad.
El de Península Mitre configura, así, un reclamo histórico pero, por sobre todo, invita a la posibilidad de generar conciencia sobre la urgente necesidad de proteger este lugar que es único en el mundo. La zona en cuestión comprende unas 200.000 hectáreas de mar y 300.000 hectáreas de tierras fiscales, es el mayor punto de captura de carbono de Argentina.
¿Cómo es eso posible? Porque alberga un extenso humedal muy particular, el de las turberas, que tiene la capacidad de fijar y almacenar dióxido de carbono (CO2), uno de los gases de efecto invernadero que contribuye al calentamiento global.
Además, en sus costas se concentra el 50% de los bosques de macroalgas del Mar Argentino. De la misma manera que las selvas tropicales cumplen un rol fundamental para la salud del planeta, estas selvas submarinas también: las mismas podrían absorber más de 150 mil toneladas de CO2 anualmente y son considerados de los ecosistemas más productivos del mundo. En particular los bosques de macroalgas de Tierra del Fuego son uno de los últimos refugios globales para estos bosques sumergidos.
¿Cuál es la intención de proteger Península Mitre?
Según la Fundación Rewilding Argentina, entidad que promueve la iniciativa de conservación y protección del lugar, consideran que de protegerse el área se transformaría en un Área Natural Protegida Provincial, permitiendo la posibilidad de preservar sus ecosistemas y evitando su degradación. Aseguran que hoy la falta de regulación y fiscalización en el área es una problemática grave ya que, por ejemplo, los daños a las turberas son irreversibles y a su vez cuando se destruyen liberan el dióxido de carbono almacenado nuevamente a la atmósfera.
Frente a un contexto de crisis climática, ecológica y social, donde los más afectados serán los países y comunidades del sur global, la protección de espacios naturales como la Península Mitre son herramientas fundamentales para la mitigación del cambio climático tanto a escala regional como global, no solo desde el punto de vista de la conservación ambiental sino desde el fomento de nuevas economías basadas en el desarrollo local.
¿Cuál es el estado actual del proyecto de ley que busca crear el área protegida?
Como respuesta a situaciones que amenazan la conservación del área, a finales del 2020, a través de un decreto por parte del Poder Ejecutivo provincial, se le proporcionó cierto marco de protección provisoria hasta tanto sea sancionada la ley definitiva que cree el área protegida. Este año el proyecto de ley volvió a tomar estado parlamentario por lo que los 14 legisladores de Tierra del Fuego deberían reunirse para finalmente lograr su sanción.
Por lo pronto, distintas voces se han sumado a la protección de Península Mitre a través de una acción en redes sociales lanzada junto a Sin Azul No Hay Verde -el Programa de Conservación Marina de Rewilding Argentina-, con el objetivo de apoyar la creación del área. También sumaron su firma a la petición que ya lleva más de cinco años y ha alcanzado unas 150.000 firmas juntadas.