Construido en 1565 como un pasaje secreto para la poderosa familia Medici, el Corredor Vasari ha permanecido oculto a la mayoría durante siglos. Hoy, esta joya renacentista se revela al mundo, permitiendo a los visitantes caminar sobre la historia y disfrutar de vistas exclusivas de una de las ciudades más icónicas de Italia.
El corredor, que conecta el Palazzo Vecchio, las Galerías Uffizi y el Palazzo Pitti, fue diseñado por Giorgio Vasari en tan solo cinco meses, a petición de Cosimo I de Médici. Esta pasarela privada de 750 metros ofrecía a la familia gobernante un trayecto seguro entre su hogar y sus oficinas, lejos de las miradas y los riesgos del público.
Elevado sobre los edificios y calles de Florencia, el corredor ofrece un recorrido único por encima del famoso Ponte Vecchio, con ventanas panorámicas que fueron añadidas durante el siglo XX. Estas vistas, disfrutadas antaño por duques y dictadores, ahora están al alcance de todos por primera vez.
El recorrido, que inicia en el segundo piso de los Uffizi, lleva a los visitantes a través de frescos, techos altos y una pasarela cubierta con ladrillos de terracota. A medida que atraviesan iglesias, torres medievales y los Jardines de Boboli, los visitantes se sumergen en una experiencia única que conecta pasado y presente.
Simone Verde, director de los Uffizi, describe al Corredor Vasari como una «ciudad paralela dentro de la ciudad», un lugar donde la cultura y el poder se entrelazan. Aunque las paredes, alguna vez adornadas con más de mil obras de arte, están actualmente vacías, el espacio conserva la esencia de su diseño original del siglo XVI.
Las entradas tienen un costo de 43 euros (45 dólares) para una visita combinada con los Uffizi, o 20 euros (21 dólares) como complemento a una entrada existente. Los primeros domingos de cada mes serán gratuitos, aunque la demanda ya ha agotado las reservas para los próximos meses.
Explorar el Corredor Vasari es más que un paseo por Florencia; es un viaje a la grandeza del Renacimiento, una oportunidad única para ver la ciudad como lo hizo la élite de una época dorada.
