Para enfrentar al malvado coronavirus cientos de proyectos de vacunas salieron a la luz en unos pocos meses. Esto no es nada raro, es la primera vez en la historia de la humanidad que todos los países del mundo luchan contra un mismo enemigo y aportan financieramente a laboratorios modernos para crear una solución a este horrible virus.
Y tu mismo lo podes ver, probablemente tengas un amigo o un familiar vacunado, o incluso tu tambien ya lo estés, pero, ¿Cómo pasaron de haber cientos de vacunas disponibles a solo un par? ?¿Qué pasó con las demás?
La respuesta rápida es que la OMS no aprobó las demás vacunas, aunque seguro, como gran curioso que sos, te preguntes cómo se aprueba una vacuna, y de eso mismo vamos a hablar hoy.
Fase preclínica 1
Primero, luego de desarrollarse la vacuna, sea de vector viral, de el virus inactivo, o con ARN o ADN (nota editor: en esta parte se va a mostrar en los gráficos de qué trata cada vacuna), empieza la fase preclínica.
La vacuna se testea en animales y se evalúa el mecanismo de acción, toxicidad e inmunología.
Una vez que se puede probar que es apta para la utilización en humanos se pasa a la Fase Clínica 1, en la cual menos de 100 voluntarios participan, y donde se evalúa la seguridad y la respuesta inmunológica en adultos jóvenes sanos.
Fase Clínica 2
Participan de 100 a 1000 personas y aquí se evalúa la dosis, vías de administración, eficacia y seguridad en distintos grupos de población. Gracias a esta fase podemos saber con certeza cuál es la vacuna más apta para cada grupo poblacional y cuantas dosis se necesita para conseguir la mayor efectividad.
Fase Clínica 3
Es una de las más importantes, aquí los participantes escalan a decenas de miles de personas de todas las edades y se prueba la eficacia y la seguridad de la vacuna. Esto se calcula con participantes placebo.
¿Qué quiere decir esto?
Básicamente se eligen a dos grupos de personas, supongamos para entender mejor esto que son 200 personas en total, (es decir 100 en cada grupo). A un grupo se le da la vacuna real, la que está siendo testeada,y al otro grupo se le da un placebo, que se podría decir que es una vacuna falsa.
Ambos grupos de personas siguen su vida normal y ninguno de los dos grupos (ni el médico) sabe cuál vacuna tiene.
Los científicos monitorean a estas personas durante meses para ver cuales tienen coronavirus y cuáles no, cuales tienen síntomas y cuáles no, y al finalizar la investigación se cuentan las personas que tenían la placebo y cuantas la real.
Todo esto determina la eficacia de una vacuna, si 200 personas de las 200 tienen covid-19, la misma tendría un 0% de eficacia, ya que serías propenso a enfermarte siendo de un grupo o de otro.
Si 100 personas que se enfermaron fueran del grupo placebo, la vacuna tendría una eficacia de un 100%, ya que no serias propenso a tener el virus.
Y finalmente un ejemplo más cercano a la realidad sería un caso en el cual 84 personas enfermas pertenecieran al grupo placebo y el 16 restante sea del grupo vacunado. Esto se traduciría en que las 16 personas del grupo vacunado tuvieron un 92% de probabilidades de no tener coronavirus, porcentaje de eficacia que tiene, por ejemplo, la “Sputnik V”.
Fase clínica 4
Comienza y nunca termina realmente, ya que consiste en el seguimiento de efectos secundarios que puedan aparecer cuando la vacuna se aplica a mayor escala.
Todas las vacunas que pasen con éxito estas fases clínicas y no muestren efectos secundarios fatales o contraproducentes, serán aprobadas por la Organización Mundial de la Salud, que es el organismo de la ONU especializado en gestionar la salud a nivel mundial.
Da miedo pensar que todas estas fases tan extensas y complejas hayan pasado tan rápido, nos hace pensar que todo esto es una conspiración y que las vacunas en realidad son chips de control mental.
Pero hay que entender que la ciencia y medicina moderna con recursos ilimitados de parte de todos los países, y con una investigación hecha en plena pandemia donde se pueden hacer fases clínicas en simultáneo, con varias vacunas de distintas procedencias y con muchos voluntarios dispuestos a darlo todo por enfrentar este virus, facilita y acelera todo el proceso.
