En un logro sin precedentes, la alpinista Phunjo Lama ha establecido un nuevo récord mundial al realizar el ascenso más rápido al Monte Everest por una mujer. Lama completó la hazaña en 24 horas y 26 minutos, comenzando su ascenso desde el campamento base a las 3:52 pm del 23 de mayo y alcanzando la cima a las 6:23 am del día siguiente.
Lama tardó 14 horas y 31 minutos en llegar a la cumbre y otras nueve horas y 18 minutos en descender. Aprovechando la noche para evitar las multitudes, Lama logró esquivar las largas filas de escaladores que suelen formarse en las rutas hacia la cima. Se estima que entre el 21 y el 22 de mayo había alrededor de 6.700 personas entre los campos dos y cuatro, pero Lama se colocó detrás de solo “60 o 70” personas en la mañana del 24 de mayo.
El Monte Everest, con sus imponentes 8.849 metros (29.032 pies) de altura, es el sueño de todo alpinista. Lama pasó tres semanas aclimatándose en el campamento base antes de iniciar su intento récord. En esta expedición, estuvo acompañada por Samantha McMahon, quien aspira a ser la primera mujer australiana en escalar todos los picos de 8.000 metros del mundo.
Este nuevo récord no es el primero para Lama, quien en 2018 estableció un tiempo de 39 horas y seis minutos en su primer ascenso rápido, superado luego en 2021 por Ada Tsang de Hong Kong con 25 horas y 50 minutos. A pesar de estos logros, Lama insiste en que no está obsesionada con los récords ni busca el reconocimiento de Guinness World Records, y que alguien más se encargó de contactar a la organización en su nombre en 2018.
Criada en una comunidad de pastores de yaks en el remoto valle de Tsum en Nepal, Lama vivió la mayor parte de su vida a altitudes entre 4.500 y 5.000 metros sobre el nivel del mar. No fue hasta su adolescencia en Katmandú que descubrió el montañismo como profesión y aprendió a hablar nepalí e inglés.
Lama espera que en el futuro haya una mayor participación femenina en el montañismo, actualmente dominado en un 75% por hombres. Ya ha alcanzado la cima del Denali en Alaska, la montaña más alta de América del Norte, y tiene planes de escalar el K2 en Pakistán, el segundo pico más alto del mundo.
La temporada de escalada de 2024 en el Everest ha traído nuevos cambios, como la introducción de chips de seguimiento para todos los escaladores y la obligación de retirar sus desechos en bolsas de plástico, una medida para combatir el creciente problema de la basura en la montaña.