En Zhuzhou, China, ha surgido una innovación que promete transformar la movilidad urbana: el ART (Autonomous Rail Rapid Transit), un tren que no necesita rieles. Este vehículo único, desarrollado por CRRC Corporation, se desplaza sobre «vías virtuales» marcadas en el asfalto con líneas blancas, eliminando la necesidad de construir costosas infraestructuras ferroviarias.
Con capacidad para 300 pasajeros, el ART combina tecnología avanzada de sensores y rutas preestablecidas con neumáticos de caucho, lo que le permite ofrecer un transporte más económico y respetuoso con el medio ambiente. Además, su diseño garantiza un funcionamiento silencioso y una reducción significativa de la contaminación en áreas urbanas.
Este avance no solo marca un hito en el transporte público, sino que también abre la puerta a soluciones más sostenibles y adaptables para enfrentar los desafíos de la congestión urbana y mejorar la calidad de vida en las ciudades. ¿Será esta la movilidad del futuro que esperábamos?