Activistas ecologistas del colectivo «Ultima Generazione» arrojaron pintura rosa a la fachada del Palazzo Madama, la sede del Senado de Italia, en un nuevo acto de protesta de este grupo para alertar contra la crisis climática.
Tres de los cinco responsables fueron arrestados en plena acción y deberán presentarse ante el tribunal de Roma, según informaron las Autoridades italianas, mientras que los otros dos restantes fueron denunciados por darse a la fuga.
Al respecto, el presidente de la Cámara Alta, Ignazio La Russa, expresó: «El Senado fue elegido cobardemente porque a diferencia de otras instituciones, nunca se ha considerado la necesidad de crear un área de seguridad alrededor del edificio, hasta ahora».
«El Gobierno italiano es criminal porque financia los combustibles fósiles», afirmaron los activistas en un vídeo que se viralizó en las redes sociales. Asimismo, también alertaron sobre un futuro «sin comida» y con una Italia «desertificada» por culpa del cambio climático.
Por su parte, Matteo Salvini, vicepresidente del Gobierno y ministro de Infraestructuras declaró a la prensa que las personas que arrojaron pintura al edificio «son vándalos, no activistas. Es necesario un castigo ejemplar para quienes desfiguran y dañan obras de arte, cuadros, museos y monumentos históricos, no sin antes limpiarlo todo y reparar el daño causado».
Recordemos que el Palacio Madama es uno de los edificios más importantes y representativos de la ciudad de Roma.
Por su parte, la organización emitió un comunicado en su página web al respecto de los hechos: «Esta mañana a las 7:45, cuatro ciudadanos pertenecientes a la campaña Última Generación embadurnaron el Palacio Madama con un chorro de pintura naranja, utilizando extintores. En la base del gesto, la desesperación que deriva de la sucesión de estadísticas y datos cada vez más alarmantes sobre el colapso ecoclimático, que ya ha comenzado, y la indiferencia del mundo político ante el que promete ser el mayor genocidio. en la historia de la humanidad».
