Yuri Borisov, el nuevo jefe de la agencia espacial rusa Roscosmos, anunció que a partir de 2024, Rusia dejará de operar en la Estación Espacial Internacional (ISS), y se concentrará en construir su propio puesto en órbita que le brindará al país los servicios espaciales necesarios para la vida moderna, por ejemplo, navegación y transmisión de datos.
Por su parte, Vladímir Soloviov, diseñador general de la corporación de ingeniería espacial rusa RKK Energiya, anunció que la construcción de la nueva Estación de Servicio Orbital rusa (ROSS) podría comenzar en 2028, es decir que habría un lapso entre la fecha de salida del ISS y la puesta en marcha de la nueva estación.
Asimismo, la decisión de Moscú fue calificada de «desafortunada» por el vocero estadounidense del Departamento de Estado, Ned Price, quien se mostró sorprendido por el anuncio en medio de altas tensiones entre Moscú y Occidente por los combates en Ucrania. Probablemente, el anuncio de Rusia generará especulaciones sobre posibles maniobras de Moscú, para obtener el alivio de las sanciones occidentales a causa de la guerra.
Sobre la Estación Espacial Internacional
Se encuentra dirigida conjuntamente por Rusia, Estados Unidos, Europa, Japón y Canadá; y se utiliza para realizar investigaciones científicas en gravedad cero, además de probar tecnología para futuros viajes a la Luna y Marte.
El complejo consta de dos secciones principales, una dirigida por Rusia, la otra por Estados Unidos y otros países. Por lo general, tiene una tripulación de siete personas, que pasan meses a bordo de la estación mientras orbita a unos 420 kilómetros sobre la Tierra.
La Estación Espacial Internacional, ha sido durante mucho tiempo un símbolo del trabajo en equipo posterior a la Guerra Fría en nombre de la ciencia, pero actualmente es una de las últimas áreas de cooperación entre Estados Unidos y Rusia.
