Llegó a Italia en Diciembre del 2018 con la intención de obtener la ciudadanía italiana y luego poder viajar por toda Europa. Su motivación más grande para dejar Argentina era la de recorrer muchos destinos en poco tiempo y sentía que instalada en el viejo continente iba a ser más simple y económico. Así fue como eligió Sorrento, el lugar donde había nacido su abuelo y donde hasta el día de hoy tiene familia.
Sin embargo, una vez instalada en Italia, el trámite tardó más de lo planeado, por lo que tuvo que asentarse en la ciudad y conseguir un trabajo. Pero en esa espera, terminó conociendo al hombre que hoy es su marido.
Fue el típico cliché de amor a primera vista en una callecita chiquita de Italia. En conclusión, me quedé en Italia por amor. Así que cambié todos los planes, elegí quedarme con él, me casé en plena pandemia en un pueblito con vista a la isla de Capri y decidí dedicarme a explorar más dentro esta región italiana, que por suerte tiene mucho para ofrecer.
Sofía, 28 años, Argentina, oriunda de Capital Federal, es periodista, pero desde que llegó a Europa trabajó en actividades asociadas al turismo: desde negocios de souvenirs hasta agencias de viajes y tours. En este momento y desde octubre del 2020 se encuentra sin trabajo debido al cese de la actividad por Covid19. Mientras tanto, alimenta su blog y redes (@ssofid) donde cuenta cómo es vivir en de Italia.
Desde chiquita su familia la acostumbró a esta vida de viajes y cambios, así que la elección de mudarse al exterior no fue difícil. Viene de una familia de hoteleros, pero recién descubrió su pasión por los viajes cuando se mudaron a Merlo, San Luis, donde vivió 9 años y tuvo contacto directo con el turismo.
Se casó en octubre de 2020, en plena pandemia, con un ucraniano (que vive hace 20 años en Italia). Hicieron una reunión muy chiquita, una ceremonia por civil en Massa Lubrense, frente de la isla de Capri.
Rompimos todas las tradiciones italianas, ni siquiera me vestí de blanco, pero quisimos aprovechar el impulso del «hoy y ahora» que nos dejó la pandemia para casarnos y no dejar planes para más adelante.
Hay una cosa cierta dentro de esa frase que se repite mucho de que «los argentinos somos parecidos a los italianos». El estilo de vida no es tan diferente, pero es un país muy tradicionalista, entonces hay costumbres muy marcadas, siempre relacionadas a las festividades católicas, que se respetan y se cumplen.
Pero la costumbre que más llama la atención y que uno incorpora enseguida es la forma que tienen de consumir el café, el cual más chiquito, más concentrado y fuerte de lo que estamos acostumbrados en Argentina. Forma parte de su «ritual» diario, ir al bar, pedir un café, tomarlo de un sorbo e irse. O también llegar al trabajo con una botellita de café recién hecho del bar y vacitos descartables para compartir.
El café no falta nunca, no solo a la mañana, también después del almuerzo o en cualquier momento del día, incluso hasta en horario laboral. Incluso muchos prefieren desayunar en la calle con un café y un «cornetto» rápidamente. Casi siempre cuando te invitan a tomar un café es literalmente eso, ir, tomar el café e irse y generalmente es de pie en la barra porque cuesta menos.
¿Qué es lo que más te gusta y lo que menos te gusta de vivir en Italia?
Lo que más me gusta, sin dudas, es la parte gastronómica y la importancia que se le da a la comida. Es muy interesante aprender sus recetas, la selección perfecta de productos e ingredientes, entender lo que genera para ellos cada plato, la historia detrás de cada preparación y la abundancia de comida en la mesa de todos los días. Cada acontecimiento o fiesta importante gira en torno a esto.
Lo que menos me gusta de vivir en Italia es que, en algunas ciudades, especialmente en la zona de la península sorrentina y la costa amalfitana, acceder al mar o a ciertos espacios naturales, no es libre y gratuito. La mayoría de las playas están privatizadas y los costos son realmente elevados, ya que hay que pagar ingreso y a veces te exigen el alquiler de reposeras y sombrillas (entre 10 y 20 euros al día). Otro aspecto negativo son los impuestos altos y la burocracia lenta, que complica un poco hasta los trámites más simples y te deja atrapado dentro de un sistema engorroso.
Llegué a Italia sin saber hablar el idioma y creo que fue el peor error que cometí. Me costó momentos feos, maltrato por parte de empleados públicos a la hora de hacer trámites y en consecuencia también siento que perdí muchas oportunidades laborales debido a esto. Por eso siempre recomiendo a quienes están por emigrar prestar atención a estos detalles y no dejar de lado el idioma local.
Cuáles son los campos laborales que crees tienen más salida para alguien pensando en instalarse en Italia?
Justamente, al ser la gastronomía tan importante, es también el rubro al que se hace más fácil acceder. Al haber tantos bares y restaurantes, siempre hay mucha demanda tanto de cocineros y ayudantes, como de meseros y otros trabajos relacionados a la cocina y al rubro.
Igualmente, dentro de la misma línea, el turismo es otro punto fuerte del país, que representa el 6 por ciento de la ocupación laboral por la cantidad de viajeros que llegan al año. Guías, hoteleros, choferes, etc. son algunos, pero en consecuencia de la cantidad de trabajo y el poco tiempo que las personas pasan en sus casas, los trabajos de baby sitter o el de cuidar personas ancianas también son muy requeridos y fáciles de encontrar.
¿Un viaje no tan típico por Italia que recomendarías a alguien?
Entiendo que la isla de Capri es una de las más famosas al mundo, pero en la misma zona están dos islas que valen la pena sumar al itinerario y recomiendo profundamente: Procida e Isquia.
Procida fue elegida como la Capital italiana de la Cultura 2022. Súper pintoresca, con casitas de colores que son la postal perfecta. Un destino ideal para disfrutar en una escapada de verano, ya que al ser chiquita se recorre y disfruta en solo uno o dos días.
Isquia es famosa por sus termas, gracias a estar ubicada en zona volcánica, que hace que el agua suba de temperatura. Es muy interesante y encantadora, con una gran oferta de actividades turísticas y gastronómicas y playas divinas. Un dato de Hollywood: algunas escenas de la última película de «Hombres de Negro», protagonizada por Chris Hemsworth, fueron grabadas en esta isla.
Y no puedo dejar de lado otra recomendación: subir hasta el cráter del volcán Vesubio. Es considerado el volcán activo más peligroso del mundo, así que genera mucha adrenalina caminar sobre él y conocer más sobre su historia. La vista desde allá arriba es impactante. Y ya que se está de paso, hay que aprovechar y probar el típico vino cosechado en el suelo fértil vesubiano, llamado «Lacryma Cristi».
8 respuestas
Hermosa nota! Hermosa persona Sofi!
Amé está nota! Me parece preciosa y pura y tiene una información super valiosa!! Muchísimas gracias!!!
Mi linda Sofi. Desde Argentina siempre te extrañamos, pero sabemos que estas muy feliz alla, parte de tus sueños siempre fue vivir en el exterior.
Te amamos peti de nuestro cor????????
¡Hermosa nota! Hermosa historia de amor y de vida, para escribir un libro.
Que buenas las aclararaciones de Sofi sobre el idioma y la burocracia. Y cuando habla de la gastronomia me dan ganas de irme para allá volando.
Sofa te admiro!!! Verte feliz y enamorada me pone muy contenta. Que te siga tocando todo lo lindo ????. Te adoro Sofaaaaaaa ????????
Molto interessante Sofi, grazie per questa preziosa informazione e il tuo contributo per la comunità!
Gracias Sofi por esta nota hermosa! Y por la información que nos haces llegar a los que amamos la Italia y todavía no pudimos caminarla. Estás siendo feliz como siempre soñaste o tal vez mejor! Ti amo e mi manchi molto! ????✨
Cuando orgullo me da, mi amiga de tantos años. La vida te premia, porque te lo mereces. Seguí cumpliendo sueños????????
Te veo pronto amiga ????