La cantidad de perros ha aumentado tanto en muchos países que, en algunos lugares, ya superan el número de niños. Este fenómeno responde, en gran medida, a un cambio en las preferencias de vida de las nuevas generaciones, quienes buscan en los perros un apoyo emocional fundamental.

La investigadora Enikő Kubinyi, de la Universidad Eötvös Loránd en Hungría, estudió esta tendencia y concluyó que el vínculo afectivo con los perros cumple un papel crucial en la vida de muchas personas. “En las sociedades occidentales, existe una notable falta de cuidado y apoyo social, que la gente intenta compensar, al menos en parte, con sus mascotas, principalmente perros y gatos”, explicó.
Kubinyi señaló que muchas personas han vivido experiencias dolorosas en sus relaciones humanas y han encontrado en los perros un amor y consuelo incondicionales. Esa conexión emocional profunda es una de las razones por las cuales los perros han ganado preferencia frente a la decisión de tener hijos.

Sin embargo, la investigadora advirtió que es fundamental fortalecer los sistemas de apoyo social familiar y reducir el aislamiento social. “Tener un perro es maravilloso cuando ayuda a conectar a las personas en lugar de aislarlas”, agregó.
Además, Kubinyi indicó que este cambio en la relación entre humanos y perros tiene raíces evolutivas, biológicas y culturales, reflejando una transformación profunda en la forma en que las personas buscan compañía y apoyo en el mundo actual.


