Sin dudas, esta es una noticia muy tentadora para los amantes del vino. Y seguro de que, con tan solo leer el título mencionando un jacuzzi con vino caliente, has pensado en el placer de sumergirte en una mini piscina completamente cubierta de una de nuestras bebidas favoritas en el mundo. Si es así, quizás Inglaterra sea un destino a marcar en tu lista de próximos viajes.
Se trata de una inédita propuesta de Shrigley Hall en Cheshire, un spa en Inglaterra ha impulsado la creación de la mejor experiencia de jacuzzi al ofrecer un «Spa de vino caliente». Allí los huéspedes podrán sumergirse en un jacuzzi lleno de vino caliente, aprovechar varios tratamientos con temática de vino caliente y tomarse unas copas de la emblemática bebida navideña mientras lo hacen.
En Shrigley Hall han dispuesto, precisamente, una tina que se llenará con vino tradicional de Borgoña caliente y se mantendrá a 98,6 grados. La idea es que cada uno de los participantes de la experiencia disfrute de un buen rato mientras accede a un tratamiento saludable para su organismo. Con la presencia del vino caliente, los poros se abren, liberando toxinas y permitiendo que la piel absorba los taninos del vino caliente.
Cabe destacar que, los ingredientes del vino, como naranja, canela y anís estrellado, gozan de excelentes propiedades para el cuidado del cuerpo: supuestamente proporcionan un alto nivel de antioxidantes para lograr una desintoxicación bastante sólida. La experiencia del spa también incluye un masaje con incienso de 45 minutos y un exfoliante corporal que mezcla los aromas de azúcar morena, canela y naranja.
Así mismo, según ha indicado la firma de spa SpaSeekers, recurrir a un spa de vino trae numerosos beneficios: puede desde aumentar el flujo sanguíneo, mejorar la salud cardíaca, estimular la circulación, suavizar la piel y reducir la inflamación, sin mencionar el beneficio obvio de la relajación pura.
Para los interesados en conocer más en detalle sobre este nuevo atractivo de jacuzzi con vino caliente en el spa, los precios del spa comienzan en US$ 80 por persona y pronto se podrán reservar en el sitio web oficial de Shrigley Hall.
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