La tecnología de la NASA podría ayudar a salvar a los tiburones ballena, los peces más grandes del mundo, recopilando información que permitiría saber a dónde se van estos animales para aparearse. Esto sería clave para poder proteger esas zonas de reproducción.
Los tiburones ballena son el pez más grande del mundo y se encuentran en peligro de extinción. Según las estimaciones realizadas, se calcula que la población de la especie en los últimos 75 años se redujo en más de un 50%, según informó el sitio de noticias CNN. Esto se debe tanto al impacto del cambio climático sobre este grupo de animales como a las actividades humanas, como la industria pesquera incluso en aquellos lugares donde está prohibido.
Para ayudar a proteger esta especie, el biólogo marino Brad Norman fundó, en colaboración con otras personas, The Wildbook for Whale Sharks. Este es una base de datos que se encuentra en línea desde el año 2003 y almacena fotografías que diferentes personas toman de los animales de esta especie. Allí, las personas alrededor del mundo pueden subir imágenes de tiburones ballena y el sistema utiliza tecnología de la NASA para ubicar su ubicación y rastrear sus movimientos.
La tecnología de la NASA lo que permite es que un algoritmo escanee los espacios y las maracas que se encuentran en la piel de estos animales, y como cada patrón es único, ellos funcionan como si fuesen sus huellas dactilares. De esta menara el algoritmo permite identificar a cada ejemplar de la especie de acuerdo a sus marcas. Esto es posible, según explicó CNN, porque las marcas en la piel de los tiburones ballena forman patrones similares a los de las estrellas en el cielo.
Brad Norman explicó que conocer la ubicación exacta de estos animales, así como sus rutas de migración y lugares de reproducción, permiten desarrollar estrategias para la protección de su hábitat. «Yo solo puedo estar en un solo lugar a la vez», dijo. «Es muy importante tener a personas del público que colaboran con nuestro proyecto», agregó.
Hasta el momento, la base de datos cuenta con más de 70.000 cargas por parte de las personas en general, científicos y operadores de guías para conocer estos tiburones ballena, y provienen de más de 50 países.