Tragedia en el Monte Whitney: adolescente cae al vacío tras sufrir alucinaciones por mal de altura

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Redactora
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Una caminata que parecía rutinaria entre padre e hijo terminó en tragedia cuando Zane Wach, un joven de 14 años de California, cayó 36 metros (120 pies) por una pendiente del Monte Whitney tras sufrir un episodio severo de mal de altura. Ahora, se encuentra en coma inducido, luchando por su vida en un hospital de Las Vegas.

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Zane, acompañado por su padre Ryan Wach, emprendió la travesía el pasado 10 de junio por una de las rutas más desafiantes del monte. Aunque era su primera vez allí, su papá no estaba preocupado: el adolescente era atlético y con experiencia en senderismo. Pero tras superar el tramo más exigente del recorrido, Zane comenzó a mostrar síntomas preocupantes: náuseas, fatiga y luego, alucinaciones.

“Me dijo que estaba viendo cosas”, relató Ryan. “Veía muñecos de nieve donde había nieve, o a la rana René en los lagos lejanos. Lo decía como si supiera que no era real… pero también empezó a dudar de lo que era real y lo que no”.

Con el objetivo de volver al campamento base, Ryan le sugirió a su hijo descansar. Aunque al principio pareció mejorar, el adolescente empeoró: dudaba si estaba soñando y se negaba a avanzar. “Me decía ‘esto no es real’”, recordó su padre, visiblemente afectado. “Yo intentaba convencerlo de que todo era real, que estábamos a pocas horas del auto. Pero él no podía salir de esa confusión”.

En un momento, mientras Ryan se secaba las lágrimas, Zane se alejó hacia el borde. “Estaba a unos tres metros. Hice un movimiento para tratar de alcanzarlo… pero ya era tarde”, narró con dolor. El joven se precipitó al vacío ante los ojos de su padre.

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Ryan descendió de inmediato al lugar de la caída, temiendo lo peor. “Lo vi y pensé que estaba muerto. Pero cuando lo giré, hizo un sonido, todavía respiraba”. Un paramédico que pasaba por el lugar ayudó a estabilizar al chico hasta que un equipo de rescate logró evacuarlo seis horas después.

Actualmente, Zane está siendo tratado en Sunrise Children’s Hospital, donde fue extubado recientemente. Sufrió traumatismo craneal, una fractura de tobillo, un dedo roto y una lesión en la pelvis, pero sus signos vitales son estables. Su familia, que ya recaudó más de 20.000 dólares a través de GoFundMe, agradece el apoyo recibido y mantiene la esperanza de una recuperación total.

“Está mejorando… pero todavía queda un largo camino”, aseguró Ryan.

Lo que comenzó como una aventura entre padre e hijo, terminó siendo una pesadilla marcada por el impacto de la altitud en el cuerpo humano. Una historia que revela la delgada línea entre la naturaleza imponente y el peligro invisible que esconde.

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