Un insólito y trágico accidente sacudió al estado de Uttar Pradesh, en el norte de India, cuando un grupo de monos saltó sobre un cable eléctrico en las inmediaciones del templo Ausaneshwar Mahadev, provocando su caída y generando pánico entre los devotos que se encontraban rezando durante la madrugada del domingo.
El cable desprendido transmitió corriente a tres techos de chapa del complejo, electrocutando a varios fieles y causando una estampida en la que murieron al menos dos personas y resultaron heridas más de 40, de las cuales 19 sufrieron descargas eléctricas, según confirmó el magistrado distrital Shashank Tripathi.
La tragedia ocurrió alrededor de las 2 de la mañana, justo cuando una multitud comenzaba a congregarse para realizar las ofrendas del lunes, en plena celebración del mes sagrado de Shravan, un período clave en el calendario hindú.
“Los devotos estaban ofreciendo oraciones cuando un mono saltó sobre un cable eléctrico, provocando que cayera sobre un techo. Esto generó que la corriente pasara por la estructura. Hay dos personas en estado crítico y el resto continúa bajo tratamiento médico”, explicó Tripathi a los medios locales.
El primer ministro de Uttar Pradesh, Yogi Adityanath, expresó sus condolencias y anunció una compensación de 500,000 rupias (alrededor de 4,300 libras esterlinas) para cada familia de las víctimas fatales.
Lo ocurrido se suma a otro episodio mortal registrado el mismo día en el vecino estado de Uttarakhand, donde al menos ocho personas murieron y treinta resultaron heridas en el templo Mansa Devi, en Haridwar, luego de que se desatara el pánico por un rumor de que una línea eléctrica se había roto en las escaleras de acceso.
Estos incidentes vuelven a poner en evidencia los problemas de gestión de multitudes en celebraciones religiosas masivas en India, donde no son raras las estampidas. En febrero, decenas de peregrinos hindúes perdieron la vida en el Maha Kumbh Mela en Prayagraj, con cifras extraoficiales que superaron ampliamente a las informadas por el gobierno.
