En alguna parte del mundo, un chino no puede decir que llega tarde porque vive lejos de la estación de tren. Y aunque resulte increíble, es real. En Chongqing, una de las ciudades más pobladas de China que alcanza los más de 30 millones de habitantes, el tren pasa hasta entre los edificios.
No es un efecto óptico: la estación llamada Liziba y está en el centro de ese edificio. Parece una idea digna de desencadenar un acontecimiento desafortunado, sin embargo, el gobierno ideó esta increíble estrategia para solucionar los problemas de transporte urbano que aquejaban a la masiva ciudad. Particularmente, este transporte es la línea 2, que pasa por el corazón de un edificio residencial de 19 pisos y que tiene alrededor de 1.500 inquilinos.
Sin dudas, la pregunta del millón es cómo hicieron para construir esto: a juzgar por las imágenes, podríamos decir que construyeron una línea de tren elevada, y en uno de sus tramos atraviesa un edificio a la altura del sexto piso. ¿Increíble no?
Según han explicado, durante los trabajos de construcción de la línea, inaugurada en el año 2004, los ingenieros no demolieron el barrio residencial que se encontraba allí sino que idearon algo más osado: que atravesara la arquitectura que ya estaba vigente en la zona. Al ser una zona montañosa también presentaba dificultad por este relieve que supieron solventar.
Otra gran incógnita es cómo pasa el tren sin molestar a las personas que viven allí, ya que todos sabemos que vivir en los alrededores de una estación de tren es todo menos silencioso. En este caso, el ruido que produce cada formación es de 60 decibelios, lo mismo que se escucha cuando uno enciende un lavavajillas (y menos mal porque la frecuencia del tren es cada dos minutos).
Contrariamente a lo que la gente podría creer, los alquileres en el edificio por donde pasa este transporte han subido y es mucha la demanda. Al tener el tren tan cerca, ¿será que todos quieren quedarse en la cama un ratito más? ¿o será otro cuento chino?