Un vuelo de United Airlines que cubría la ruta entre San Francisco y Roma encendió las alertas internacionales tras emitir una señal de socorro en pleno vuelo. El incidente ocurrió el pasado sábado 21 de junio, cuando el vuelo 507, operado por un Boeing 777 de 26 años de servicio, debió desviar su ruta y aterrizar de emergencia en Islandia.
La aeronave, que transportaba a 275 pasajeros y 14 tripulantes, despegó a las 17:03 (hora local) del aeropuerto de San Francisco. Ocho horas después, en plena travesía sobre el Océano Atlántico, un problema mecánico obligó a la tripulación a descender rápidamente hasta los 6.400 metros de altitud.

Ante la gravedad de la situación, el piloto activó el código 7700, una señal internacional de emergencia que indica peligro inmediato. Inmediatamente, se desvió hacia el Aeropuerto Internacional de Keflavik, en Islandia, donde aterrizó sin inconvenientes alrededor de las 8:00 de la mañana del domingo (hora local).
Los pasajeros fueron evacuados de forma segura y el avión fue remolcado a una zona remota del aeropuerto. No se reportaron heridos, según confirmó la compañía aérea en un comunicado, y todos los viajeros fueron alojados en hoteles mientras esperaban un nuevo vuelo hacia Roma, programado para el lunes siguiente.
Este no es el primer incidente que United Airlines enfrenta en esta ruta. En agosto de 2024, la misma conexión sufrió varios desvíos y cancelaciones por problemas mecánicos y emergencias médicas, lo que ha generado preocupación entre los viajeros frecuentes.

A pesar del susto, la rápida reacción de la tripulación evitó una tragedia mayor y permitió que todos los ocupantes del vuelo 507 regresaran a tierra sanos y salvos.