Usualmente en Estados Unidos los jóvenes tienen que esperar para ver qué universidad los acepta y desde ahí organizar su vida facultativa. Pero en el caso de Micheal Brown, un joven de 17 años, él es el que decide a dónde quiere ir y qué quiere hacer… ya que fue aceptado en 20 de las mejores universidades de todo el país.
Él envió 20 solicitudes y todas fueron aceptadas con becas completas. Stanford, Harvard, Princeton, la Universidad de Pennsylvania, Northwestern, Georgetown y la Universidad de Michigan, son solo algunos de los establecimientos que lo quieren como alumno.
Las credenciales de Micheal incluyen un promedio de calificaciones de 4.68, un puntaje de ACT de 34 de 36, un puntaje de SAT de 1540 de 1600 y actividades externas como su equipo de debate escolar, Key Club y varias pasantías.
«Cuando estaba en la escuela primaria, vi a mi madre graduarse de la universidad comunitaria y eso significaba mucho para mí.»
Micheal tiene hasta el 1 de mayo para decidir a qué universidad asistirá. Su mamá quiere que elija Stanford ya que fue a la que desde pequeño quiso, pero pensando desde lo que le conviene, quizás Harvard sea su mejor opción.
Sea cual sea, él planea especializarse en ciencias políticas y convertirse en abogado, con el fin de poder ayudar a otros estudiantes de color a conseguir el mismo apoyo que él recibió de diferentes organizaciones para poder llegar a donde está hoy parado.