Un tranquilo viaje hacia las islas Canarias se convirtió en una pesadilla para los pasajeros del crucero Spirit of Discovery, cuando una brusca maniobra de seguridad durante una tempestad en el Golfo de Vizcaya desencadenó el pánico a bordo. Más de 100 pasajeros resultaron heridos por el impacto del giro inesperado, desatando escenas de caos y terror en el barco.
Con una angustia palpable, uno de los pasajeros describió el momento como una experiencia aterradora: «Decir ‘heridas leves’ es un insulto a las horribles fracturas de huesos, pelvis, laceraciones, suturas que sufrieron los pasajeros».
«Pesadilla en alta mar»: La maniobra del capitán, llevada a cabo en medio de una tormenta desenfrenada, dejó al crucero en una situación precaria, con pasajeros atemorizados y enfrentando condiciones climáticas extremas. Testimonios impactantes revelan escenas de caos y supervivencia a bordo del barco.
El dramático relato de Jane Bendall, de 75 años, pintó un cuadro desgarrador de la lucha por la vida en medio de la tormenta: «Estuvimos atrapados en medio de la tormenta durante 15 horas… Nos aferramos a la vida». Mientras el capitán tomaba la decisión de regresar al Reino Unido, la tripulación enfrentaba desafíos sin precedentes para mantener la calma y la seguridad a bordo.
A pesar de los esfuerzos del equipo de rescate, el impacto del giro repentino dejó a muchos pasajeros con lesiones graves, evidencia de la intensidad del evento traumático en el mar. La empresa Saga, propietaria del crucero, emitió disculpas a los afectados, reconociendo la naturaleza impredecible de las condiciones climáticas marinas.
Esta historia nos recuerda la vulnerabilidad de la vida en alta mar y la importancia crucial de la seguridad en los viajes marítimos.
