En diversas formas, la suerte puede sonreírte en la vida, y un ejemplo de esto es Marlene Engelhorn, quien ha heredado su fortuna. Con 29 años, Marlene estudia Lengua y Literatura alemana en Viena, pero es reconocida por ser descendiente de los fundadores de BASF, una de las mayores empresas químicas del mundo. En el año 2021, la compañía generó ingresos que superaron los 78.000 millones de euros.
No obstante, últimamente, los medios han estado centrados en Engelhorn debido a su decisión de declinar el 90% de su herencia. ¿Cuál es el motivo detrás de esto? Su deseo de no ser «excesivamente adinerada». Esta postura la ha compartido en varias entrevistas con medios de Alemania y Austria. La joven, que se destaca por liderar movimientos con una profunda conciencia de igualdad, aboga por una distribución más equitativa de la riqueza y sostiene que aquellos con mayores recursos deben asumir una carga tributaria más alta.
La abuela de Marlene figura en el puesto 687 de la lista de las personas más acaudaladas a nivel mundial, de acuerdo con la revista Forbes. Esta riqueza deriva de los más de 150 años de existencia de la empresa, cuyos beneficios parecen causar inquietud en la protagonista de esta narración: «No me corresponde a mí decidir qué hacer con el dinero de mi familia, ya que no he contribuido en su generación», declara en una de las entrevistas.
Engelhorn no elude su posición privilegiada de «joven adinerada», según sus propias palabras, y es consciente de que su lugar de nacimiento le ha brindado oportunidades a las que no todos pueden acceder. No obstante, sostiene que todo tiene un límite y que acumular vastas sumas de dinero no debería ser la norma en una sociedad tan marcada por la desigualdad.
Ella aboga con firmeza por la idea de que no requiere tanto dinero. En primer lugar, porque carece de un propósito claro para gastarlo, y en segundo lugar, porque cree que un exceso de riqueza solo conlleva tensiones, complicaciones y malentendidos. «No podría encontrar la felicidad de esa manera», recalca.
«No se trata de cuestión de voluntad, sino de equidad. No he contribuido de ninguna manera para merecer esta herencia. Esto es mera fortuna en la lotería del nacimiento y mera casualidad», argumenta.
Esta perspectiva la ha impulsado a convertirse en una decidida defensora de la justicia social, lo que la llevó a establecer AG Steuersrechtigkeit, un movimiento que se ha extendido por toda Europa con el nombre de Taxmenow. Este movimiento implica que los herederos de grandes fortunas renuncien a sus legados en favor de una carga impositiva más alta para los adinerados. «Como alguien que ha experimentado los privilegios de la riqueza a lo largo de toda mi vida, soy consciente de lo desequilibrada que está nuestra economía y no puedo quedarme pasiva esperando que alguien, en algún lugar, tome medidas», explicaba en una entrevista con la BBC.
La redistribución de la riqueza, la imposición a los millonarios y cambios significativos en la estructura de los puestos de alto rango son algunas de las demandas de Engelhorn para lograr una mayor igualdad social.