Lo que debía ser una simple escala turística en Alaska terminó en tragedia. Marites Buenafe, una médica de 62 años oriunda de Kentucky, fue encontrada muerta en una zona montañosa y boscosa cerca de Juneau, días después de haberse bajado del crucero Norwegian Bliss para realizar una caminata.
El último contacto que tuvo con su familia fue la mañana del 1 de julio, cuando les informó por mensaje que haría una excursión por el sendero hacia Gastineau Peak. Las cámaras de seguridad la captaron saliendo del teleférico Mount Roberts a las 7:30 a.m., pero nunca regresó al barco, que zarpó ese mismo día por la tarde. Al notar su ausencia, la tripulación reportó su desaparición a las autoridades.
Se activó de inmediato un amplio operativo de búsqueda, con la participación de rescatistas especializados, helicópteros, drones con cámaras térmicas y perros rastreadores. Durante dos días, el equipo peinó la zona de Gold Ridge, conocida por sus paisajes pero también por su terreno difícil y clima cambiante.
El jueves 3 de julio, cerca del mediodía, el cuerpo de Buenafe fue hallado oculto entre la vegetación densa. Aún se desconoce la causa exacta de su muerte, que está siendo investigada por el médico forense estatal.
Buenafe era una reconocida especialista en medicina familiar con más de dos décadas de experiencia. Había viajado a Alaska como parte de unas vacaciones a bordo del crucero. Norwegian Cruise Line activó su protocolo de apoyo a la familia desde el momento en que se reportó la desaparición.
Las autoridades locales recordaron que el senderismo en Alaska, incluso en rutas populares, conlleva riesgos y debe realizarse con preparación adecuada, comunicación constante y respeto por la naturaleza.
