Una turista escocesa fue atacada por un oso después de bajar la ventana de su automóvil para tomarse una selfie con el animal.
Moira Gallacher y su amiga, Charmian Widdowson, viajaban por las Montañas de los Cárpatos en Rumania cuando se encontraron con una familia de osos.
Asombradas por la vista, la mujer de 72 años y su compañera bajaron la ventana para tomar una foto con los animales salvajes.
El oso se había acercado al automóvil y, según Gallacher, les permitió tomar una foto y luego se alejó. Pero Gallacher y Widdowson regresaron ya que la foto que tomaron fue inadecuada.
Según The Mirror, un oso se paró sobre sus patas fuera del vehículo y atacó el brazo de Gallacher.
Afortunadamente, la amiga de la turista condujo rápidamente para escapar de un posible ataque más grave, y ella fue llevada a un hospital cercano para recibir tratamiento.
STV News señala que la mayor población de osos pardos se ha descubierto en Rumania. Los animales, que suelen hibernar en invierno y emergen en marzo/abril, pueden alcanzar velocidades de hasta 30 mph y medir 7 pies de altura.
Andreea Gheordunescu, gerente del Hospital Municipal de Curtea de Argeș, dijo a la publicación que un paciente extranjero estaba recibiendo tratamiento en una de sus manos después de ser mordido por un oso.
Tras el ataque, la policía se organizó en equipos para alejar a los animales de la zona. También informaron a los residentes y turistas que siempre mantengan una distancia segura si se encuentran con ellos en la naturaleza.
Este incidente ocurrió días después de que turistas en Carolina del Norte fueran vistos sacando crías de oso negro de un árbol para tomarse una foto. El video, grabado el martes, muestra a aproximadamente seis personas en un complejo de apartamentos del condado de Buncombe sacando tres crías de oso negro de un árbol sobre una cerca, según informó ABC 13 News.
Las autoridades locales fueron alertadas, lo que provocó la intervención de Ashley Hobbs, bióloga de proyectos especiales de la Comisión de Recursos de Vida Silvestre de Carolina del Norte.
Hobbs, al ver el video de las tres crías, descubrió que solo quedaba una al llegar al lugar.
«Seguimos a las personas que sacaron al oso del árbol», informó Hobbs al medio.
«Los confrontamos en el lugar ese día y les informamos lo irresponsable y potencialmente mortal que podría ser para esa cría separarse de su madre, especialmente arrancada de un árbol así».
Hobbs destacó lo inusual de que una madre oso deje a sus crías desatendidas en un árbol durante esta temporada, señalando que la cría solitaria parecía muy mojada y fría, probablemente habiendo sido dejada sola durante un período prolongado.
