Venecia volverá a implementar una medida que generó polémica en los últimos años: el cobro de una entrada para quienes visiten la ciudad por el día. A partir de 2026, los turistas deberán reservar con antelación su ingreso y pagar una tarifa de 5 euros, o 10 euros si lo hacen de forma tardía.

La decisión busca regular el turismo masivo, que cada año atrae a más de 30 millones de visitantes y genera fuertes críticas por el impacto en la vida cotidiana de los locales y el desgaste de sus calles históricas. La tasa solo aplicará a quienes pasen el día en la ciudad —el llamado “turismo de fuga”— y no a los que se alojen, estudien o trabajen allí.
El sistema ya se había probado en 2024, cuando se emitieron más de 485 mil pases, recaudando 2,4 millones de euros. Aunque muchos consideraron que no logró desalentar la llegada de turistas, el alcalde Luigi Brugnaro defendió la iniciativa y aseguró que ayudó a encontrar un “equilibrio adecuado” entre preservar la ciudad y no afectar su atractivo.

El pase funcionará mediante un código QR que deberá presentarse en estaciones de tren, terminales y otros puntos de acceso. También habrá controles aleatorios, y quienes ingresen sin el permiso podrán recibir multas de hasta 300 euros.
La medida se aplicará en 60 días de temporada alta —entre abril y julio— y solo durante el horario de 8.30 a 16 horas. Las fechas confirmadas para 2026 son las siguientes:
- Abril: 3, 4, 5, 6, 10, 11, 12, 17, 18, 19, 24, 25, 26, 27, 28, 29, 30.
- Mayo: 1, 2, 3, 8, 9, 10, 15, 16, 17, 22, 23, 24, 29, 30, 31.
- Junio: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 12, 13, 14, 19, 20, 21, 26, 27, 28.
- Julio: 3, 4, 5, 10, 11, 12, 17, 18, 19, 24, 25, 26.
Con esta iniciativa, Venecia intenta reducir la presión del turismo masivo y garantizar que la experiencia sea más sostenible tanto para los visitantes como para quienes habitan la ciudad de los canales.

