Kenny Sim y su esposa son dos viajeros empedernidos. Tres años atrás, cuando decidieron casarse, no tenían mucho dinero como para contratar un fotógrafo que los siguiera por el mundo sacándoles fotos para el día de su boda, así que decidieron prepararse y hacerlo ellos mismo.
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Zhu, la esposa de Kenny, se compró varios conjuntos de ropa y tomó clases de automaquillaje para poderse producir en cada destino. Cuando ya estaba casi todo listo, lo único que les faltaba era una buena cámara y, su gran aliado, un trípode.
Viajaron durante tres años a través de cinco continentes: Asia, América, Oceanía, Europa y África. Visitaron unos 70 destinos y sacaron miles de fotos. Además de un gran viaje, fue un gran desafío, ya que, sin ser fotógrafos profesionales, debieron preparar todo en cada lugar que visitaron para poder lograr la foto perfecta.
