Una verdadera hazaña: en las últimas horas, alrededor de 150 alpinistas hicieron cumbre en un día en el K2. El acontecimiento tuvo lugar el pasado 22 de julio y fue registrado por la alpinista de la etnia sherpa Mingma G en Instagram. La cifra representa casi la mitad de todos los que alcanzaron la cima de «la montaña de la muerte», como se la conoce.
Se trata de algo casi inesperado dentro del mundo del montañismo: 150 alpinistas hicieron cumbre en un día en el K2 y la sorpresa es tal ya que, junto con el Annapurna y el Nanga Parbat, forma parte de las cimas más complejas de alcanzar. El motivo que da lugar a la extraordinaria imagen es que los sherpas de Nepal trasladan a la segunda montaña más elevada y peligrosa del planeta el modelo de negocio del Everest.
Sus 8611 metros la posicionan como la segunda montaña más alta del mundo, pero el K2 es el resto más exigente que cualquier alpinista pueda enfrentar en este planeta. Hasta febrero del 2021, eran 377 los alpinistas que habían logrado alcanzar la cima. Ahora, de un día para otro, fueron nada más y nada menos que 145 los que llegaron al pico.
De esta manera, 145 alpinistas, la misma cantidad que las que lograron llegar entre 1954 y 1996, fueron los que tuvieron que esperar en un camino sinuoso y temerario. Cabe destacar que los montañistas sí o sí deben atravesar un serac colgante, es decir, por una enorme masa de hielo que en cualquier momento puede perder toneladas de su configuración.
Conoce al K2, la gran bestia dentro del alpinismo
El nombre K2 nace a raíz del Gran Proyecto de Topografía Trigonométrica. En 1856, Thomas Montgomerie hizo la primera exploración del Karakórum realizando un dibujo de los dos picos más prominentes, llamándolos K1 y K2.
La política era usar nombres locales para las montañas, y el K1 se descubrió que localmente era llamado Masherbrum. En cambio, el K2 no había adquirido ningún nombre local, posiblemente a causa de lo complejo que era llegar a su ubicación. ¿Cómo es esto posible? Si bien la montaña tiene una cima de menor altura que el Everest, se considera que su cima es más compleja de alcanzar por la climatología y su mayor altura comparativa respecto al terreno circundante, por lo que se la conoce como “La Montaña Salvaje” o de la «muerte».
¿Mito, leyenda o circunstancias?
Existe una popular leyenda para los especialistas que dice que el K2 tiene una maldición para las mujeres. Si bien la primera mujer en alcanzar la cumbre fue la polaca Wanda Rutkiewicz en 1986, tal parece que, luego, de las siguientes cinco mujeres en llegar a la cima fallecieron (tres de ellas en el descenso y las otras dos ascendiendo otros ochomiles).
Rutkiewicz también murió en el Kangchenjunga en 1992. Por su parte, la española Edurne Pasabán fue la excepción, pudiendo descender con éxito, aunque le valió perder por congelamiento dos falanges de los dedos del pie, que debieron ser amputados.