En nuestro último viaje nos perdimos en la inmensidad de los Alpes italianos. Más precisamente en la cadena montañosa conocida como los Dolomitas. Los alemanes conocen esta zona por el nombre de Süd Tirol (Tirol del sur) y hay que decir que es una zona bastante particular. Si bien pertenece a Italia, alrededor del 80% de la población habla alemán y tienen mucha independencia. Algo similar a lo que ocurre con Bayern (Bavaria) en Alemania.
→ Encontrá los vuelos más baratos a Italia!
Más allá de esto, es una región donde las montañas están formadas por enormes macizos de piedra separados por bosques y prados. El sonido de las campanas que cuelgan del cuello de las vacas es una constante, e incluso en un momento nos pareció ver a Heidi corriendo por el campo.
De este entorno de cuento les queremos compartir los 3 lugares que más nos cautivaron y, a nuestro criterio, son imperdibles para quien visite los Dolomitas: (cada uno parece una foto de rompecabezas)
1. Lago di Braies
Posiblemente el más hermoso de los lagos de la región. Y sin dudas el más fotografiado, además de ser muy famoso en Instagram (quizá ya lo vieron sin saber dónde quedaba).
Es accesible en auto y tiene la particularidad de estar encerrado por las montañas. Allí encontrarán una vieja cabaña con muelle de madera sobre el agua que alquila botes de remos.
Pero el lugar tiene un secreto. Como en un cuento de Disney, la magia del lago se activa al
atardecer. En ese momento los botes se guardan y casi todos los turistas se van. El agua queda en calma y el silencio se apodera del ambiente. Es entonces, que con los últimos rayos de sol del día, el lago se transforma en un espejo. Y es como si la cabaña con sus botes flotaran en el cielo. Es tan mágico que no se puede apartar la mirada.
→ Encontrá los vuelos más baratos a Italia!
2. Las Tres Cimas de Lavaredo
El monte Tres Cimas es la gran estrella de los Dolomitas y no podía estar fuera del podio. Sería casi una ofensa no incluir esta cima que fue nombrada Patrimonio Mundial por la UNESCO y es visitado por miles de turistas todos los años. Para llegar hasta él debemos subir hasta los 2500 m.s.n.m. por un camino con curvas de 360° que te sacan el aliento.
Al llegar a la base del macizo rocoso que le da nombre (tres rocas colosales de 500 m de altura), podemos comenzar la caminata. El sendero más conocido es el que da la vuelta alrededor de la montaña pasando por tres refugios. El recorrido no es demasiado exigente pero requiere de unas 6 horas de trekking (parando a comer).
Las vistas que se tienen son impresionantes. Tanto si miramos hacia arriba a la montaña como al valle que se extiende debajo.
3. Lago Sorapis
Quizá sea el menos conocido de los tres, pero tiene su lugar bien ganado. El lago Sorapis se esconde en una meseta a 1930 m.s.n.m. Y cuando decimos que “se esconde” es en sentido figurado. Para llegar a este pequeño lago se necesitan 2:30 hr. de caminata, de las cuales las últimas 2 hr. son en constante subida. En total hay que trepar 600 m (a veces usando las manos).
Esto le da cierto aire de exclusividad. Sólo aquellos realmente dispuestos suben a verlo.
Pero el esfuerzo tiene su recompensa. Aparece de repente y sin previo aviso para sacarnos el poco aliento que nos quedaba. El lago de Sorapis tiene un color turquesa muy fuerte. Sus aguas son lechosas y casi parece que fuera sólido. Al estar totalmente encajonado en la montaña corre poco viento y su superficie es un espejo inmaculado.
Estos son nuestros 3 imperdibles de los Alpes Italianos y esperamos haber despertado tus ganas de visitarlos, ¿cuál te gustó más?