Seguramente pensabas que Egipto tenía la mayor cantidad de pirámides en el mundo, pero no. Ese país tiene alrededor de 138 estructuras, en cambio Sudán cuenta con más de 250 ubicadas a lo largo del río Nilo, conformando un área que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Este sitio arqueológico (en el que funcionaba la importante ciudad de Meroe) está a casi 300 kilómetros al norte de la capital del país, Jarum.
Aunque actualmente es un árido desierto, 2000 años atrás la vegetación y la fauna del lugar era muy distinta. En ese entonces, sus habitantes se dedicaban a la caza y la pesca pero las actividades que más enriquecieron a Meroe fueron la extracción y comercio internacional de oro y hierro.
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Mientras millones de viajeros eligen conocer Egipto, este tesoro arqueológico permanece casi olvidado a causa de distintos conflictos que, con el correr de los años, dejaron a Sudán en una posición poco ventajosa frente al turismo.
La construcción de estas pirámides fue llevada a cabo por los nubios y tuvo lugar entre los años 1070 a.C. y 350 d.C., durante el Reino de Kush. Se distinguen de otro tipo de pirámides por ser más delgadas y de menor tamaño, tienen entre 6 y 30 metros de alto. Según los expertos, se trata de tumbas de antiguos monarcas y el tamaño varía de acuerdo a la duración del mandato de cada uno de ellos.
Además de estas construcciones, más cerca del río Nilo quedan restos de impresionantes palacios y templos.
