El hallazgo tuvo lugar frente a las costas de Cerdeña, en la región de Italia, y llama poderosamente la atención que el tiburón carece completamente de la piel que lo caracteriza.
La piel es un órgano importante y necesario para todas las especies, inclusive para los tiburones. Su piel produce una mucosidad que los protege de posibles infecciones bacterianas y también es una barrera que los protege de parásitos y depredadores, que no son pocos. En este caso, el tiburón encontrado por el equipo de biólogos, un ejemplar de pintarroja bocanegra, carece por completo de las estructuras que forman parte de la piel en cualquier otro ejemplar.
El Galeus melastomus, nombre científico que posee esta especie de tiburones, que hallaron no tiene dermis ni epidermis, y tampoco los dientes y dentículos que tendría cualquier otro tiburón. Aún así, a pesar de eso, se encontraba con buena salud y nadando a unos 500 metros de profundidad antes de ser capturado por los biólogos.
Aunque no posee dientes, no tuvo problemas en encontrar formas de alimentarse para sobrevivir todo este tiempo y eso probablemente se deba a que los tiburones pintarrojas tienden a tragar sus presas enteras. Lo que llama la atención es haya vivido tanto tiempo y de esta forma, sin dientes y sin piel.
Si bien los biólogos no saben de manera exacta cómo es que el animal puede haber perdido toda su piel, manejan diferentes hipótesis. Por un lado, barajan la posibilidad que de alguna manera esté relacionado con la actividad humana y el impacto que tiene en el medio ambiente y los cambios climáticos que se dan alrededor del mundo, tanto en agua como en tierra. Es decir, debido a causas ambientales. Ésta también incluye la posibilidad de que haya estado expuesto de forma prolongada a diferentes sustancias contaminantes, o que el calentamiento de las aguas del Mediterráneo junto al aumento de su acidez haya tenido algo que ver.
Por otro lado, se plantea la chance de que haya sido algo que sucedió de forma natural durante el desarrollo embrionario del tiburón. La realidad es que hasta el momento no hay ninguna certeza, aunque los investigadores están estudiando al animal para poder averiguar las razones de su condición actual. El hallazgo fue realizado en Julio 2019 pero recién fue publicado este año en la revista Fish Biology.
