Uruguay es el país de los maravillosos atardeceres, de sitios históricos en Colonia, de glamour en Punta del Este y de tranquilidad en Cabo Polonio.
Si estás buscando un plan de fin de semana, divertido pero menos turístico que Colonia o Punta del Este, entonces Piriápolis es una gran opción. El primer balneario de Uruguay cuenta con atardeceres, playas, cerros y castillos para que el tiempo en la ciudad se disfrute al máximo.
Ubicado a 40 km de Punta del Este y a 100 km de Montevideo, visitar Piriápolis en 48 horas es el tiempo ideal para conocer la ciudad y descubrir sus secretos.
Día 1
Por la mañana
Visita el Castillo de Piria
A 7 km del centro de Piriápolis, se sitúa la primer construcción del balneario: la residencia de los primeros fundadores de la ciudad, la familia Piria. Este castillo, de estilo medieval, data del año 1897 por quien fuera el primer promotor turístico de Uruguay. Francisco Piria logró convencer a los adinerados propietarios de Montevideo a comprar hectáreas y viviendas en lo que sería el próximo centro y balneario turístico vacacional, dando honor a su apellido: Piriápolis.
El castillo se puede visitar y dentro se presentan objetos de la época, fotos, mueblería traída de Europa y hasta los volantes de propaganda que utilizó la familia para «convencer» a los inversores de construir en «la próxima Niza de Sudamérica«.
El Castillo de Piria es una excursión que atrae a los visitantes más curiosos a conocer su construcción, sus jardines exóticos y los secretos que guarda en su interior.
Dato importante: la entrada es libre y gratuita.
Por la tarde
Cerro San Antonio
Ya que la mañana ha comenzado de manera tranquila pero descubriendo secretos de los comienzos de Piriápolis, luego de un rico chivito uruguayo de almuerzo, puedes destinarte a recorrer uno de los cerros que rodea la ciudad: el Cerro San Antonio.
Para poder llegar a la cima y disfrutar de vistas panorámicas, se pueden elegir entre tres opciones: a pie, en automóvil o a través de las aerosillas. Si no tienes problemas de vértigo, la mejor opción es disfrutar de un tranquilo paseo «volando» hacia la cima del cerro.
Una vez en la cima, además de sacar fotos panorámicas de la ciudad, los visitantes pueden visitar una pequeña capilla blanca con la imagen de San Antonio que, según la historia, es visitada por quienes buscan conseguir pareja.
Recorrido por el puerto
La bajada de las aerosillas termina en el puerto de Piriápolis por lo que es una gran oportunidad para poder recorrerlo. El puerto es muy pintoresco e ideal si uno es fanático de los barcos. Desde allí, se pueden realizar excursiones por la bahía para ver el atardecer.
Día 2
Por la mañana
Cerro Pan de Azúcar
Para todos los turistas que buscan algo más de turismo aventura, la mejor recomendación para hacer en 48 horas en Piriápolis es visitar el Cerro Pan de Azúcar. Esta visita tiene un poco más de dificultad que el Cerro San Antonio ya que es imprescindible subir a pie.
La «escalada» es de dificultad media, pueden hacerla desde niños hasta adultos mayores (cuidando la salud), siempre y cuando se cuente con zapatos cerrados y 2 litros de agua por persona, un requisito excluyente por parte de los guías locales.
Luego de las casi 2 horas de caminata por el cerro a través de su frondosa vegetación, se llega a la cima del cerro más alto de Uruguay, donde se encuentra emplazada una cruz de 35 metros de altura. Para completar la visita y ver la ciudad de Piriápolis cada vez más pequeña, es recomendable subir a la cruz y caminar sobre sus «brazos».
Dato importante: Antes de subir a cualquiera de los cerros, es recomendable acudir al Centro de Información Turística de Piriápolis para corroborar si los accesos están abiertos.
Por la tarde
Un recorrido por las playas
Si el clima acompaña, es recomendable tomar un tiempo libre para descansar en las amplias playas de Piriápolis que conforman un atractivo en sí. Las playas del centro suelen ser un poco más frecuentadas que las que se encuentran a los extremos de la ciudad.
La Rambla de los Argentinos
Como te contábamos antes, Uruguay cuenta con una gran cantidad de spots fotográficos para ver el atardecer y la Bahía de Piriápolis es uno de ellos. La mejor opción es caminar por la Rambla de los argentinos, en el centro de la ciudad. En la misma se puede divisar otra de las construcciones emblemáticas de Piriápolis: el Hotel Argentino, construido en el año 1930 en semejanza a los hoteles de la Costa Azul de Francia.
Para la época fue uno de los hoteles más lujosos de América del Sur, frecuentado por la aristocracia de Montevideo y Buenos Aires.
Paseo La Pasiva
Para finalizar el recorrido de 48 horas en Piriápolis y comprar recuerdos de la ciudad, la mejor opción es dirigirse al Paseo La Pasiva, allí se emplaza una feria de artesanos donde venden distintas artesanías y souvenirs.
48 horas en Piriápolis es el tiempo ideal para disfrutar de lo más importante de la ciudad balnearia. Sin embargo, si cuentas con más tiempo o prefieres planear tus próximas vacaciones en Piriápolis, no te pierdas de realizar recorridos en bicicleta, de hacer el tour vintage en un automóvil antiguo o de visitar el Castillo Pittamiglio.