“Un lugar para uno y el mundo”, relatan algunos viajeros que han disfrutado de la naturaleza casi inalterada de uno de los sitios más bellos de Uruguay: Cabo Polonio.
El Parque Nacional y balneario de Cabo Polonio es un lugar que muchos viajeros lo eligen como retiro espiritual, de desconexión de la rutina y del aprovechamiento del contacto de con la naturaleza sin aglomeraciones de personas. Es por eso que en este post te contaremos las 5 razones por las que todo turista (local e internacional) debería visitar Cabo Polonio, al sudeste de Uruguay.
1. La sensación de libertad
La palabra libertad tiene muchos significados y cada una de las personas puede tener un concepto diverso acerca de qué significa libertad, sin embargo, hay un sitio donde seguramente todas las definiciones convergen: Cabo Polonio.
En Cabo Polonio no hay señal de televisión, luz eléctrica ni agua corriente, la señal de teléfono rara vez se conecta. Esto hace que la desconexión de la rutina y “del mundo” sea total, haciendo que los turistas disfruten de la sociabilización con otros “relajados” turistas, de los fogones (controlados, claro está) en la playa y del sonido de una guitarra acústica de algún musico viajero.
El movimiento hippie “instalado” en los años 60’, se mantiene hasta la actualidad, permitiendo que “cada quien pinta su casa como prefiere”, manteniendo esta sensación de libertad donde cada uno se expresa artísticamente como más lo prefiera, dándole, posiblemente sin querer, un encanto singular a Cabo Polonio.
2. Las noches más estrelladas y lunas más luminosas de Uruguay
“Del mundo” nos parecía mucho y de la costa, nos parecía poco. La escasez de arboles y la inexistencia de alumbrado público, hace que las noches de Cabo Polonio sean una experiencia y una de las mejores cosas para hacer en la costa uruguaya.
La tranquilidad y paz del sitio se fusionan con la naturaleza haciendo que los niveles de estrés desciendan abruptamente, permitiendo que los turistas puedan relajarse al oír los sonidos del mar, sentir el aire puro y disfrutar de uno de los pocos (lamentablemente) sitios del mundo donde la contaminación es prácticamente nula.
Muchos viajeros utilizan linternas para caminar durante la noche, ya que a las 12 se apagan todos los generadores de los alojamientos y casas. Sin embargo, los locales insisten con lo mismo: “los ojos pueden acostumbrarse” donde afirman que no es 100% necesario utilizar las linternas, sino que la misma luz de la inigualable luna, alumbra los caminos para transitar.
3. Deportes y actividades al aire libre para los más aventureros
Visitar Cabo Polonio no implica ir a la playa y dormir, claro que no. Visitar Cabo Polonio implica adentrarse en la naturaleza y disfrutar las ventajas de un sitio prácticamente virgen.
La propia llegada a Cabo Polonio ya es una experiencia más: los autos tienen prohibido ingresar y la entrada al Parque Nacional incluye el traslado de ida y vuelta en camiones 4×4 que atraviesan las dunas que rodean al pequeño pueblo.
Las caminatas al faro, los paseos por las dunas, el surf en el Océano Atlántico y el avistamiento de lobos marinos, son solo algunas de las tantas actividades que se pueden hacer en la región.
4. Atardeceres inigualables
La costa uruguaya ha sido extremadamente favorecida con los atardeceres, famosos a nivel mundial. En un lugar donde la contaminación lumínica es inexistente, donde los edificios no están y donde el sol cae en el mar, el atardecer es uno de los mejores espectáculos que ver en Cabo Polonio.
Durante el ocaso, el color de Cabo Polonio pareciera que se tiñe de anaranjado y permite que los turistas contemplen la belleza natural de los atardeceres, en un sitio donde no hay más que preocuparse que por esperar la caída del sol. Un sitio donde las redes sociales desaparecen y el mundo “se detiene” haciendo que el disfrute sea la única actividad indispensable de cada quien que visita este mágico lugar.
5. La tranquilidad para descansar
A veces las grandes ciudades son muy bellas para visitar pero para quienes no acostumbran a los “ruidos citadinos”, las bocinas y actividades regulares de la ciudad, dormir puede ser una tarea complicada.
En Cabo Polonio, esto no pasa. El pequeño pueblo de pescadores se populariza año tras año pero, afortunadamente, las construcciones se encuentran suspendidas, permitiendo que se conserve la autenticidad de sus comienzos. Los pequeños alojamientos cuentan con todas las comodidades para que los turistas puedan descansar escuchando los sonidos de la naturaleza.
Cabo Polonio, la joya uruguaya, un sitio donde la naturaleza se preserva de manera tal que es protagonista de la región y permite que se pueda disfrutar a conciencia, resaltando su importancia.