Alemania emitió un billete de recuerdo con valor nominal cero euros. Se lanzó una edición limitada de 5000 piezas, que se vendieron a 2,50 € (ya se agotó, pero van a imprimir más). Está impreso en el mismo papel que los euros habituales, y tiene todos las marcas de seguridad, como las marcas de agua y los hologramas.
En una de sus caras se puede ver el Gorch Fock II, situado en Kiel, capital de estado, mientras que en la otra se ve un collage con algunos de los principales monumentos europeos: la Sagrada Familia, el Coliseo romano, la Torre Eiffel, la Puerta de Brandemburgo.
En realidad no se puede comprar nada de nada con este billete (aunque fue el Banco Central Europeo quien dio oficialmente el permiso para su impresión), simplemente está pensado para coleccionistas y viajeros que pasen por el estado alemán de Schleswig-Holstein, al norte del país.
Poder hacer un billete real pero sin valor no es nada fácil, Alemania tuvo que desarrollar un proyecto de ley, llamado Der Null-Euro-Schein richte (proyecto de euro cero), para que fuera aprobado por el Banco Central Europeo.