La isla de Procida, perteneciente a la bahía de Nápoles, ha sido elegida como la Capital Italiana de la Cultura para el año 2022. El anuncio fue realizado el pasado lunes, 18 de Enero, por el ministro de cultura, Dario Franceschini. El municipio resultó elegido entre diez candidatos y se convierte en la primera isla en recibir este reconocimiento.
Al momento de realizar el anuncio, el ministro Franceschini declaró que la isla «acompañará a Italia en el año de su renacimiento«. Procida era la única isla entre los 10 candidatos finalistas y quien le entregará el título será Parma, poseedora del mismo tanto en 2020 como en 2021. Por su parte, para 2023 la isla le pasará el honor a las ciudades de Bérgamo y Brescia, ambas fuertemente golpeadas por el COVID-19 en Italia.
«Esta enorme alegría representa el sentimiento de muchos pueblos de la Italia Menor«, declaró Raimondo Ambrosino, alcalde de Italia, para explicar el alboroto y festejo con el que se vio en la llamada de Zoom en la que se anunció que su localidad había resultado elegida. Las otras finalistas eran Ancona, Bari, Cerveteri (Roma), L’Aquila, Pieve di Soligo (Treviso), Taranto, Trapani, Verbania y Volterra (Pisa), según informó la agencia de noticias Prensa Latina.
«Procida puede considerarse una metáfora de muchos lugares, muchas administraciones, muchas comunidades que han redescubierto el entusiasmo y el orgullo de su territorio y que con este título quieren construir una redención importante para sus tierras«, agregó Franceschini mientras continuaban los abrazos y aplausos detrás suyo.
De acuerdo al comunicado de la comisión de la Capital de la Cultura, la isla es capaz de «expresar un mensaje poético, una visión de la cultura que llega al afuera desde la pequeña realidad de una isla como un buen deseo para todos nosotros, por el país, en los meses que vendrán».
Procida, por su parte, es una pequeña isla con no más de 10.000 habitantes y la primera en recibir el honor de ser Capital Cultural de Italia. Cabe tener en cuenta que el título forma parte de una iniciativa del Ministerio de Cultura de Italia para promover el desarrollo de la realidad urbana en armonía con su patrimonio histórico, artístico y arquitectónico, logrando que la ciudadanía se involucre y forme pare de él.