Reykjavik: la capital de Islandia que maravilla a todos los que la visitan

Reykjavík, la capital de Islandia, es una de las ciudades más caras de Europa y todo aquel que viaja a este fantástico lugar, le encuentra una sola desventaja: hay que ir con un presupuesto elevado. Los paisajes, las auroras boreales y la cultura de Islandia hace que pagar unos euros de más, valga la pena, aunque si se pueden encontrar cosas que hacer gratis en Reykjavík, mucho mejor, ¿verdad?

No te pierdas este post donde te listaremos todo lo que puede hacerse gratis en Reikiavik y que los presupuestos mayores se destinen a los demás atractivos del país.

1. Jardín Botánico de Reykjavík

Islandia es un país donde los paisajes deslumbran a cada uno de los viajeros, un país donde es “usual” encontrar espacios despoblados, cascadas, pedazos de hielo o senderos de trekking. Sin embargo, el clima hace que la naturaleza verde no sea la más predominante y es por eso que una visita al jardín botánico permite ver todos los colores en su máxima expresión.

El Jardín Botánico fue fundado en el año 1961 y al día de hoy sigue siendo una de las mejores cosas que hacer gratis en Reykjavík.

Dato viajero: durante el verano hay visitas guiadas gratuitas al mediodía.

2. Ascender al Monte Esja

Una de las mejores postales desde la ciudad de Reikiavik es su vista al Monte Esja, a pocos kilómetros del centro de la ciudad.

El ascenso es gratuito, lo único que es necesario pagar (en caso que no se rente un vehículo) es el bus público que acerca a los viajeros desde el centro de Reikiavik hacia los pies del Monte Esja. La altura es de 914 metros y los distintos senderos presentan distintas dificultades y miradores, permitiendo tener vistas panorámicas inigualables.

3. Free Walking Tour

Aunque un loro repetiría menos veces la palabra “free walking tour”, no hay forma que no sea una de las mejores formas que visitar una ciudad, sus atractivos más importantes y, como si esto fuera poco, conocer acerca de la cultura, anécdotas y curiosidades de, en este caso, Reykjavík.

Un tour gratuito por la ciudad donde lo único que es necesario pagar, es una propina al guía que acompaña al grupo y cuenta estas increíbles curiosidades que casi nadie sabe.

4. Una visita a la Iglesia Hallgrimskirkja

Todo lo impronunciable que tiene el nombre, lo tiene de importancia la visita a este lugar. La iglesia principal (que no es catedral) de Reykjavík, aunque parezca increíble, tiene entrada gratuita y es uno de los monumentos más importantes de toda la ciudad. El diseño se realizó siguiendo las columnas de basalto, presentes en todo el país, formando una construcción que combina arquitectura con naturaleza.

Dato viajero: se puede ascender a la torre de la iglesia de 74.5 metros a través de un ascensor, ya que cuenta con un mirador donde se pueden observar vistas panorámicas a toda la ciudad y alrededores. ¡Cuidado! Esta opción es de pago.

5. Un baño en playa de Nauthólsvík

Aunque durante el verano la temperatura media de Reykjavík sea de 18°, los lugareños tienen mucho calor corporal (sino no se explica) o saben utilizar muy bien la pequeña trampa: las aguas termales se mezclan con el agua salada del mar generando pequeños «oasis» de agua templada en algunas zonas de la playa. Toda una experiencia que ver en la «Ibiza» de Reykjavík.

Dato curioso: se dice que una de las tradiciones de Año Nuevo es correr al agua helada y fortalecer el sistema inmunológico con un chapuzón.

6. Una visita a la torre Imagine Peace

La ciudad de Reykjavík no deja nunca de sorprender y es que tiene tanto para ofrecer que es imposible aburrirse. Dentro de la isla Videy, ubicada justo frente a las costas de Reykjavík, se encuentra una torre muy particular, llamada la torre Imagine Peace (o Imagina la Paz, en español).

Es un memorial al John Lennon, dedicado por Yoko Ono, lugar donde enterró deseos que recogió a lo largo de los años. Esta torre es una obra de arte que ilumina al cielo, una combinación de factores que hacen que llegar al sitio sea realmente emocionante.

Dato viajero: llegar a la isla Videy puede hacerse en transporte público.

7. Descansar en el parque Klambratún

Pocos parques en el mundo son de pago pero encontrar lugares gratis en Reykjavík, no es tarea fácil. Sin embargo, durante un día agitado, qué mejor que descansar en el parque público Klambratún , adentrarse en la cultura local a través de los deportes o disfrutar de música en vivo con los artistas callejeros.

Bonus track: admirar la naturaleza

Sin querer caer en el típico “disfrutar de la ciudad” como actividad gratis en Reykjavík, una de las mejores cosas que pueden hacerse en la ciudad y sobre todo en todo Islandia, es admirar la naturaleza.

Los colores del cielo parecen que juegan en las distintas épocas del año formando auroras boreales, noches donde el sol nunca se pone (durante el verano) o incluso las noches polares durante el invierno.

En algunas noches despejadas, las auroras boreales pueden verse a pocos metros del centro de la ciudad, haciendo que con solo quedarse despierto unas horas más antes de dormir, se puedan ver espectáculos únicos en el mundo.

Todo puede pasar en Islandia y Reykjavík es una gran ciudad para comenzar a descubrirla.