Aunque parezca difícil de creer, no hay una reglamentación extricta acerca del color de los pasaportes, pero hay que admitir que los colores no son totalmente aleatorios. Todos los pasaportes del mundo vienen en tonos de rojo, azul, verde y negro (y sus variaciones).
No hay nada que estipule el color de la cubierta, se trata más bien de una cuestión de identidad nacional.
Pasaportes rojos
Los pasaportes de Borgoña son utilizados por miembros de la Unión Europea (sin Croacia), y los países interesados en unirse han cambiado los colores de sus pasaportes para que coincidan. La Comunidad Andina (también conocida por las ambiciones pasadas de la UE) de Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú también tiene pasaportes de Borgoña. El pasaporte suizo, combina con su bandera.
Pasaportes azules
En los estados del Caribe comúnmente usan el azul, color que también comparte el Mercosur (Brasil, Argentina, Paraguay, Uruguay y Venezuela), excepto Venezuela, que todavía tiene un pasaporte rojo de su tiempo en la Comunidad Andina. Mientras que se cree, que el color del pasaporte Estadounidense, se debe a la sombra del color de su bandera.
Pasaportes verdes
La mayoría de los estados islámicos usan pasaportes verdes debido a la importancia del color en su religión. Los miembros de ECOWAS -Comunidad Económica de los Estados del África Occidental-, incluidos Níger y Senegal, también utilizan las variaciones de verde.
Pasaportes negros
Los colores oscuros (incluso los tonos profundos de azul y rojo) muestran menos suciedad y tienden a parecer más oficiales. Los ejemplos incluyen la República de Botswana, Zambia y Nueva Zelanda, aunque para este último, el negro también se considera uno de los colores nacionales del país.