77 ballenas piloto fallecieron luego de aparecer en una playa de Orkney, en lo que podría considerarse como el varamiento masivo más grande de la década.
El grupo de rescate de vida marino británico British Divers Marine Life Rescue (BDMLR) dijo que 12 de los animales de la playa Tresness en la isla de Sanday estaban vivos cuando salieron del agua.
Pero finalmente tuvieron que tomar la decisión de sacrificarlos después de que los múltiples esfuerzos para reflotarlos no tuvieran éxito. La manada de 77 ballenas que quedó varada en la playa incluía ejemplares machos de hasta 7 metros de largo, hembras, crías y jóvenes.
Los expertos aseguran que aún es demasiado pronto para saber qué ocasionó el varamiento; sin embargo, es probable que una de las ballenas haya presentado problemas y las otras la intentaron ayudar.
Las autoridades han pedido a las personas que se mantengan al margen de la zona donde llegaron las ballenas mientras se realizan los exámenes post mortem.
El varamiento más grande se cree que ocurrió en Escocia en 1995, cuando se fundó el Plan Escocés de Varamientos de Animales Marinos (SMASS). Sin embargo, en los últimos años se han observado varamientos de escala similar.
El año pasado, una manada entera de 55 ballenas piloto murió luego de encallar en Lewis. En este caso, solo 15 de las ballenas estaban vivas cuando fueron arrastradas hasta la orilla, mientras que las demás tuvieron que ser sacrificadas.
Entre 60 y 70 animales llegaron a aguas poco profundas en Sutherland en 2011. De acuerdo al Museo de Historia Natural, el varamiento más grande en el Reino Unido tuvo lugar en 1927 y 126 de más de 130 falsas orcas murieron en el estuario de Dornoch, en las Tierras Altas.
Expertos de la BDMLR, la SPCA escocesa y veterinarios marinos del continente escocés llegaron a Sanday para examinar si alguna de las ballenas podría ser salvada.
Pero la zona quedó aislada por la marea alta y la arena de la playa estaba demasiado blanda para permitir que los mamíferos se enderezaran.
Para lograr salvar a las ballenas, se debía devolver a las ballenas a su posición vertical lo más pronto posible. Lo blanda que estaba la arena hizo que los mamíferos cayeran hacia atrás cuando los rescatistas intentaron enderezarlas.