Con apenas seis años, nueve meses y cuatro días, el pequeño Teghbir Singh, originario del estado de Punyab en India, se convirtió en la persona más joven en alcanzar la cumbre del monte Elbrus, la montaña más alta de Europa con 5.642 metros de altura.
La hazaña, que ya fue oficialmente reconocida por la Federación de Alpinismo de Kabardino-Balkaria, ha generado una mezcla de admiración y polémica en la comunidad montañista internacional.
Teghbir comenzó a entrenar a los cinco años bajo la supervisión médica de su madre, quien diseñó un programa adaptado a su edad que incluía preparación física, alimentación especial y aclimatación progresiva. Acompañado por su padre, logró alcanzar la cima tras ocho días de ascenso por la ruta clásica de la vertiente sur, partiendo desde los refugios conocidos como los “Barriles”, a 3.800 metros.
“Quería ver la nieve y tocar el cielo”, dijo Teghbir tras recibir el certificado que avala su récord.
El Elbrus, ubicado en la cordillera del Cáucaso, es un volcán inactivo con dos cimas gemelas, parte del desafío internacional de las Siete Cumbres. Si bien es uno de los picos técnicamente más accesibles del reto, las condiciones pueden ser extremas incluso en verano, con temperaturas bajo cero y vientos que superan los 100 km/h, por lo que requiere una preparación meticulosa.
La expedición del niño indio superó el récord anterior, también en manos de un compatriota, que había escalado el Elbrus a los siete años. Pero con el nuevo logro también resurgió un intenso debate sobre los límites de edad en el montañismo.
Especialistas en pediatría y alpinismo han expresado su preocupación por los efectos de la hipoxia (falta de oxígeno) y el mal de altura en menores. De hecho, la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada (FEDME) desaconseja exponer a niños menores de 14 años a alturas superiores a los 3.000 metros sin un control médico exhaustivo.
Mientras tanto, la familia de Teghbir defiende que todo fue realizado bajo estricta vigilancia médica y con el consentimiento del niño. Para ellos, no se trata de un récord, sino de un sueño cumplido en familia.
