Un polémico video grabado en el santuario Ol Jogi Wildlife Conservancy, en Kenia, desató la indignación global luego de mostrar a un turista español dándole cerveza a un elefante en plena visita. Las imágenes, compartidas en Instagram, generaron críticas masivas y abrieron un debate sobre el respeto a los animales en espacios de conservación.
En el clip se ve al hombre posando en modo selfie junto al elefante mientras sostiene una lata. Segundos después, derrama el resto de la bebida dentro de la trompa del animal, lo que provocó un inmediato repudio en redes sociales. Aunque el video fue eliminado, ya había circulado ampliamente en distintas plataformas.
El santuario emitió un comunicado en el que calificó el comportamiento como “inaceptable, peligroso y totalmente contrario a nuestros valores”. Además, aclaró que el episodio ocurrió el año pasado, pero que la viralización reciente obligó a pronunciarse.
El elefante que aparece en la grabación se llama Bupa, un ejemplar muy querido por el personal del lugar y considerado un “embajador de la conservación” debido a su rol en actividades educativas y de sensibilización. “Nos tomamos muy en serio este tipo de asuntos y seguimos comprometidos con garantizar el bienestar y la dignidad de los animales bajo nuestro cuidado”, expresaron desde Ol Jogi.
El hecho no solo expone la irresponsabilidad de algunos turistas, sino también la vulnerabilidad de animales que, incluso dentro de un santuario, pueden ser víctimas de conductas humanas imprudentes. En redes sociales, cientos de usuarios coincidieron en que se trata de un recordatorio de la necesidad de reforzar las medidas de control en este tipo de reservas naturales.

