Una práctica habitual que tiene un propósito más profundo
Cuando los pasajeros abordan un avión, es común recibir una amable sonrisa y un “bienvenidos a bordo” de parte de los tripulantes de cabina. Sin embargo, lo que muchos desconocen es que este gesto va mucho más allá de la cortesía: saludar a la azafata al ingresar al avión podría influir directamente en tu seguridad y bienestar durante el vuelo. ✈️
Lejos de ser una formalidad sin importancia, este breve intercambio de palabras es en realidad una táctica clave que utilizan los auxiliares de vuelo para evaluar rápidamente a cada pasajero a bordo. ¿Pero por qué es tan crucial este momento? A continuación te explicamos en detalle.
La verdadera razón detrás del saludo
Una evaluación rápida y esencial
Según revelaciones hechas por auxiliares de vuelo en redes sociales y medios especializados, los saludos durante el embarque no solo tienen como objetivo crear un ambiente amable para los viajeros. También son momentos cruciales que el personal utiliza para observar y analizar comportamientos, actitudes y posibles situaciones especiales.
Durante esos segundos de interacción, los tripulantes buscan identificar a pasajeros que puedan:
- Presentar signos de intoxicación o comportamientos disruptivos antes de despegar.
- Tenir habilidades útiles en caso de emergencia, como personal médico, bomberos o miembros de seguridad.
- Requerir asistencia especial, como personas mayores, con movilidad reducida o necesidades médicas.
- Portar objetos sospechosos o mostrar señales de estrés extremo.
Aparentemente informal, este saludo es en realidad una pequeña prueba de vigilancia y atención al detalle que forma parte de los rigurosos protocolos de seguridad que sigue la tripulación.
El concepto del «ABP»
En el universo de la aviación, existe el término “Able Bodied Person” (persona físicamente apta), también conocido como ABP. Se refiere a pasajeros identificados por los tripulantes como personas capaces de colaborar activamente en caso de una evacuación, emergencia médica o situación crítica a bordo.
El saludo, combinado con la observación ocular y el lenguaje corporal, le permite a los auxiliares detectar a estos ABP. De hecho, la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) apoya el entrenamiento de personal para ubicar pasajeros claves que puedan convertirse en una ayuda vital.
¿Qué pasa si no saludas a la azafata?
Mientras algunos pasajeros suben distraídamente, pegados al celular o cargando equipaje, otros evitan el saludo por timidez o prisa. No saludar a la tripulación durante el embarque no genera un problema inmediato, pero puede hacer que proyectes una imagen desconectada o incluso sospechosa sin quererlo 😬.
Recuerda que los asistentes de vuelo están entrenados para detectar pequeñas señales de conducta. Un simple “hola” o “buenos días” puede marcar la diferencia, permitiéndoles hacer una rápida (y positiva) primera impresión sobre ti.
¿Cómo puedes destacar como un ABP?
Si eres profesional de la salud, miembro de una fuerza de seguridad o posees habilidades que podrían ser útiles en un vuelo, puede ser buena idea hacerte notar. Algunas acciones que puedes tomar incluyen:
- Saludar amablemente y establecer contacto visual al abordar.
- Mencionar brevemente tu ocupación (por ejemplo: «Soy enfermero, por si necesitan algo»).
- Ocupar tu asiento con una actitud colaboradora, sin bloquear pasillos o causar demoras.
Estos pequeños gestos ayudan a construir una buena relación con la tripulación y podrían convertirte en una pieza clave si ocurre una situación de emergencia.
Lo que dicen los expertos y las aerolíneas
Este enfoque no es un secreto exclusivo de redes sociales. Varios profesionales de la aviación han confirmado que las aerolíneas instruyen a su personal para observar bien a sus pasajeros al momento de la bienvenida.
Una reconocida auxiliar de vuelo explicó a través de TikTok que lo que parecen saludos simples son oportunidades para implementar entrenamientos de seguridad en la vida real. “Cuando te saludamos, en verdad estamos verificando si estás bien. Si estás borracho, si puedes cargar a alguien, o si podrías causar problemas”, dijo la tripulante, cuyo video superó el millón de visualizaciones.
Además, el diario británico The Independent ha publicado informes sobre cómo las aerolíneas utilizan técnicas de evaluación de comportamiento desde el momento de embarque, confirmando que la seguridad empieza mucho antes del despegue.
Más allá del protocolo: empatía y trabajo en equipo
Además de sus funciones de seguridad, los saludos también cumplen un propósito emocional. Los vuelos pueden ser estresantes para muchas personas, especialmente quienes temen volar, viajan por emergencia o están lejos de casa. Un gesto amable de bienvenida puede cambiar el estado de ánimo de los pasajeros y construir un ambiente más humano dentro de la cabina.
Fue demostrado en estudios publicados por PubMed Central (NIH) que las interacciones positivas antes de un evento estresante pueden contribuir enormemente al bienestar emocional de los involucrados.
Conclusión: un simple gesto que significa mucho
La próxima vez que subas a un avión, ten presente que ese saludo que ofreces —o no— puede revelar más de lo que piensas. No solo es cuestión de buenos modales, sino que forma parte de un sistema de seguridad cuidadosamente diseñado por las aerolíneas para proteger a todos a bordo.
Así que, sonríe, di “hola” y sé amable. A fin de cuentas, podrías estar facilitando una mejor experiencia de vuelo —y tal vez, sin saberlo, colaborando en una situación de emergencia.
🛫 ¡Buen viaje!


