La pérdida de Pelusa significa un antes y un después para el zoo de La Plata. Tan fuerte resultó el impacto que las puertas del zoo no reabrirán para al público, según fuentes oficiales. Las autoridades dijeron que mantendrán cerrado el tradicional jardín para avanzar con su reconversión en un “bioparque”.
Pelusa estaba enferma, tenía un problema en sus patas traseras y estuvo, según dijeron veterinarios, más de dos años sin recostarse. Cuando lo hizo, el sábado temprano, no se levantó más.
El subsecretario de Gestión Ambiental de la municipalidad de La Plata, Germán Larran, dijo:
“La idea de encerrar animales silvestres y que vivan en cautiverio con fines de exhibición es un paradigma que se está abandonando en todo el mundo. Por eso, tomamos la decisión de mantener las puertas de este zoológico cerradas y convocar públicamente a todos los sectores y organizaciones para avanzar juntos en este proyecto”
Los funcionarios informaron que la Municipalidad decidió levantar un altar en su memoria y depositar sus restos en el lugar donde murió después de 50 años de cautiverio.
Se acercaron familias y representantes de proteccionistas hasta las puertas de la avenida Pereyra Iraola, para dejar flores y carteles para recordar a Pelusa.
El intendente Julio Garro publicó en Twitter: “Como sociedad debemos disculparnos con vos, Pelusa. Tu historia nos reafirma que los zoológicos no deben existir más y que los animales silvestres, sean de la especie que sean, no deben vivir nunca en cautiverio ni con fines de exhibición”, dice uno de ellos.