Quien haya visto la película «La Terminal», seguramente encuentre varias similitudes al leer esta nota. Pero en este caso no es ficción: un libanés cumplió 42 días atrapado en el aeropuerto ecuatoriano de Guayaquil adonde llegó deportado desde Lima debido a que no tenía documentos migratorios.
El libanés se llama Nizam Hussein Shalak, de 56 años, y viajaba desde Guayaquil a su país con escala en Perú y España. Sin embargo, al llegar a Europa se dio cuenta de que había perdido sus documentos personales.
Las autoridades ecuatorianas intentan conseguir que Líbano le extienda un documento de viaje para que pueda finalmente regresar a su país.
“Al no haber pasado migración legalmente no está en el país. El único órgano competente para emitirle un documento de viaje es el consulado de Líbano en Bogotá, quienes no han respondido a las varias insistencias para que lo hagan”
Al igual que Tom Hanks en la ficción, el libanés duerme sobre las sillas de la sala de embarque y pasa inadvertido entre la gente. Para comer utiliza tickets que canjea por comida y el personal de seguridad de la terminal aérea le permite el acceso a una zona de seguridad para que pueda bañarse cada tres o cuatro días.