Arequipa es una hermosa ciudad, con sus volcanes que la rodean, con sus construcciones coloniales y su gran gastronomía (tengan mucho cuidado si les ofrecen rocoto relleno, un ají demasiado picante).
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Está situada a una altura de 2325 msnm en las montañas del desierto de los Andes y construida casi totalmente en sillar, una clase de piedra volcánica blanca. Esta es la razón porque Arequipa se llama la Ciudad Blanca. Con su un millón habitantes, es la segunda ciudad más grande del Perú.
Te recomendamos caminar sus calles, sus pasillos y sus plazas. También conocer cómo trabajan los artesanos las telas de vicuña, alpaca, llama o guanaco.
Pero si sos un viajero que se anima a todo, que le gustan los deportes y la aventura, no podes dejar de hacer el trekking por el Cañón del Colca.
Dos días, como mínimo, para descender y ascender por las laderas del segundo cañón más profundo del mundo (4160 metros en el lado norte).
Arrancas bien temprano el primer día para llegar al Mirador Cruz del Cóndor. Vas a poder ver a estos increíbles animales:
Y cuando menos te lo esperes, vas a estar bajando unas 3 horas. Si pasaste esta primera etapa tendrías que estar a la orilla del río Colca, cruzando un puente colgante para llegar a San Juan de Chucho para poder almorzar algo y cargar energías para seguir.
Todavía te queda subir unos 150 mts y pasar dos pueblitos, Cochinigua y Malata, de no más de 300 habitantes y que aún conservan las tradiciones de sus orígenes (resistieron a la conquista Inca y de los españoles).
Ya falta menos, no te preocupes. Último tramo del día, descender al Oasis Sangalle, donde pasas la noche y completas 20 km de trekking del primer día. Te recomiendo quedarte despierto (si te da el cuerpo) para ver un cielo que no se ve en todas partes, mirá:
¡Knock knock! ¡Son las 5 am! Hay que empezar a subir. Tenés unas tres horas para llegar a la cima. No parece tanto 1100 metros de altura pero te aseguro que va a ser de lo más duro que hayas sentido si no sos un pro trekking.
¡Lo lograste! Estás arriba, con la lengua afuera y elongando para no acalambrarte.
Ya estás volviendo a casa, tranquilo. Sólo dos paradas para llenarte los ojos de unos paisajes inmensos.
Patapampa, a 4910 msnm podes ver todos los volcanes de la región: Misti, Chachani, Pichupichu, Ampata, Sabancayo.
No dejes de armar tu Apacheta (montañita de piedras que te permite pedir un deseo, según la tradición).
Y por último Reserva Natural de Salinas, donde por matar una llama, vicuña, guanaco o alpaca vas preso.
Si te cansaste con solo leer la nota, ¡imaginate hacerlo! Pero sin dudas vale la pena.
