El primer ministro canadiense anunció que planean prohibir los plásticos de un solo uso en el país a partir de 2021.
En marzo, la UE votó a favor de prohibir completamente el plástico de un solo uso para 2021, y ahora Canadá ha seguido su ejemplo en un intento por reducir la cantidad de material dañino que termina en los océanos del mundo, donde tiene impactos negativos en la vida marina.
A nivel mundial, un camión de desechos plásticos entra en el océano cada minuto, según explicó un comunicado del gobierno canadiense.
Según la BBC, menos del 10% del plástico utilizado en Canadá actualmente se recicla. Alrededor de 3 millones de toneladas de residuos plásticos se desechan cada año en el país y, como los productos tardan décadas en degradarse, simplemente obstruirán el medio ambiente durante los próximos años.
El gobierno canadiense aún tiene que decidir exactamente qué productos de plástico de un solo uso se incluirán en la lista, pero podría apuntar a productos como bolsas de plástico, popotes y cubiertos.
Menos del 10% del plástico utilizado en Canadá se recicla
Además de introducir la prohibición, el país establecerá «objetivos» para las empresas que fabrican o venden plásticos para alentarlos a ser responsables de sus residuos plásticos.
¿Qué es plástico de un solo uso?
Los plásticos de un solo uso, o plásticos desechables, se usan solo una vez antes de desecharlos o reciclarlos. Estos artículos son cosas como bolsas de plástico, pajitas, agitadores de café, botellas de refrescos y agua y la mayoría de los envases de alimentos.
Producimos aproximadamente 300 millones de toneladas de plástico cada año y la mitad es desechable. En todo el mundo solo el 10-13% de los artículos de plástico son reciclados. La naturaleza del plástico desechable a base de petróleo hace que sea difícil de reciclar y tienen que agregar nuevos materiales vírgenes y productos químicos para hacerlo. Además, hay un número limitado de artículos en los que se puede usar plástico reciclado.
El plástico a base de petróleo no es biodegradable y por lo general va a un vertedero donde está enterrado o se introduce en el agua y encuentra su camino hacia el océano. Aunque el plástico no se biodegradará (se descompondrá en una sustancia natural como el suelo), se degradará (descompondrá) en pequeñas partículas después de muchos años. En el proceso de descomposición, libera sustancias químicas tóxicas (aditivos que se utilizaron para moldear y endurecer el plástico) que se introducen en nuestro suministro de alimentos y agua.
Estos químicos tóxicos se encuentran ahora en nuestro torrente sanguíneo y las últimas investigaciones han encontrado que alteran el sistema endocrino, lo que puede causar cáncer, infertilidad, defectos de nacimiento, inmunidad deteriorada y muchas otras enfermedades.
Producimos cientos de millones de toneladas de plástico cada año, la mayoría de los cuales no se pueden reciclar. Es obvio que necesitamos usar menos plástico, avanzar hacia productos y servicios ambientalmente sostenibles y crear una tecnología que recicle el plástico de manera más eficiente.
