Las autoridades de Canadá tomaron la decisión de extender la prohibición para los cruceros hasta 2022, como mínimo. La misma entró en vigencia en Marzo de 2020, luego de que se declarara la pandemia por coronavirus, y finalizaría a finales de Febrero, el día 28, pero eso cambió.
El ministro de transporte de Canadá, Omar Alghabra, anunció el pasado 4 de Febrero la extensión de la medida que prohíbe la circulación de cruceros en aguas canadienses hasta el 28 de Febrero de 2022. «Mientras los canadienses continúan haciendo su parte para reducir la propagación de COVID-19, nuestro gobierno continúa trabajando arduamente para asegurar que el sistema de transporte de Canadá continúe siendo seguro«, declaró Alghabra en un comunicado.
En el anunció que realizó el ministro de transporte también se incluyó la extensión de la prohibición a los viajes por placer en las aguas árticas de Canadá. Esto quiere decir que todas las actividades de navegación que se realizan por placer y aventura continúan prohibidas en las aguas árticas, así como también los barcos de pasajeros que transporten a más de doce pasajeros. En relación a los cruceros específicamente, se establece que todos los cruceros que lleven a más de 100 personas «continúan prohibidos para operar en aguas canadienses».
«Las prohibiciones temporales para los cruceros y actividades por placer son esenciales para continuar protegiendo a los más vulnerables dentro de nuestras comunidades y evitar sobrecargar nuestro sistema de salud«, explicó Alghabra. «Esto es lo correcto y lo responsable», agregó.
Para las personas que no cumplan con las medidas establecidas, el gobierno de Canadá estableció una serie de multas cuyo costo variará de acuerdo a la falta cometida. En relación a las actividades por placer, los indivuos deberán pagar $5.000 dólares canadienses por día, mientras que la sanción para grupos o corporaciones será de $25.000 por día. Por su parte, los barcos de pasajeros que infrinjan la medida tendrán que enfrenar una multa de hasta 1 millón de dólares.
