Una turista española fue rescatada tras quedar atrapada dentro de la Pirámide Acodada de Dahshur, ubicada a unos 40 kilómetros al sur de El Cairo, en una operación que puso a prueba la pericia y resistencia de los equipos de emergencia egipcios.
El incidente ocurrió el domingo, cuando una llamada al número de emergencias 123 alertó sobre una persona herida en el interior del monumento. Según informó la Organización de Ambulancias de Egipto, un vehículo sanitario llegó rápidamente al sitio y los paramédicos Ahmed Ali Hamouda y Ali Hassan Abdel Majeed escucharon gritos de auxilio provenientes de la entrada de la pirámide, situada a pocos metros del suelo.
Al ingresar, descubrieron que la mujer se encontraba a unos 80 metros de profundidad, en una rampa de madera con una inclinación de 26 grados. Para llegar hasta ella, los rescatistas debieron descender por un angosto pasaje de apenas un metro de ancho y alto, donde la falta de oxígeno representó un desafío adicional.
La turista, acompañada por su esposo, había sufrido una fractura en el pie, lo que le impedía moverse. Los paramédicos lograron inmovilizar la pierna con una tabla rígida y un cinturón araña, antes de iniciar el complejo ascenso con la ayuda de los guardias del sitio arqueológico.
La Pirámide Acodada, construida durante el reinado del faraón Seneferu (alrededor del 2600 a.C.), es una de las estructuras más antiguas y singulares del Egipto faraónico. Su inclinación irregular —resultado de un cambio de diseño durante la construcción— le da su nombre y hace que su interior sea especialmente estrecho y empinado, dificultando tanto el acceso como las tareas de rescate.
La turista fue finalmente trasladada a un hospital cercano, donde recibió atención médica y se encuentra fuera de peligro. Las autoridades egipcias destacaron la rápida respuesta de los equipos de emergencia y el desafío técnico que implicó el rescate dentro de una de las pirámides más antiguas del mundo.
