Curiosa cooperativa de pesca entre delfines y pescadores en el sur de Brasil

delfines
Redactor
5/5 - (1 voto)

La cooperación entre animales de diferentes especies se da en la naturaleza por lo general, por razones de supervivencia. Por ejemplo en el contintente Africano, podés ver impalas, unos antilopes de estatura mediana, trabajar junto con los babuinos, grandes monos que no trepan a los árboles. Entre el potente olfato de los impalas y la vista privilegiada de los primates, es practicamente imposible que un predador  se acerque sin que se enteren. Lo mismo pasa entre la asociacion de las avestruces que tienen una visión privilegiada con las cebras dueñas de una audición sumamente sensible. Esa complementariedad de características logran un objetivo común a ambas especies que es sobrevivir al ataque sorpresa de las fieras que conviven en esas regiones.

Un caso curioso se dá lejos de África, cruzando el Océano Atlántico, en la Ciudad de Laguna en el estado de Santa Catarina, Brasil. Lo mas llamativo de esta cooperación es que de las dos especies, una es terrestre y la otra acuática. Se unieron por un fin común que nada tiene que ver con el miedo a un ataque. Los hombres y los delfines se ayudan mutuamente para comer. Una técnica que también tiene que ver con la supervivencia.

Los delfines son excelentes cazadores, pero colaborando con los pescadores aumentan las probabilidades de ambas especies  de obetener mas peces con menor esfuerzo. La estrategia la desarrollan de la siguiente forma: Los delfines conducen a los bancos de peces hacia la costa o los botes y les indican cuando tirar sus redes, con movimientos especificos que realizan con su cuerpo fuera del agua, una de ellas es una forma diferente de sumergirse. Mientras decenas de pescadores están  parados con el agua por la cintura, con sus redes preparadas esperando que lleguen los delfines, si no aparecen los delfines los pecadores no tiran las redes.

Laguna delfin de tahina1En el momento que se genera la maniobra de tirar las redes y recogerlas, la acción es de desconcierto para el cardumen que queda aturdido, desorientado y diezmado, tratando de escapar de las redes y ese es el momento que aprovechan los delfines para capturar a los peces que no saben para donde ir. Una asociación que lleva 2 siglos y que tanto los delfines como los pescadores, transmiten sus conocimientos de generación en generación. Muchas familias de pescadores viven de esta interacción, es una industria que depende de la predisposición de los delfines.

Pescdores atentos a los delfines

Hay una relación tan intensa entre la gente y los delfines que saben sus nombres y los identifican por características visibles en su cuerpo, como el color mas oscuro, una mancha en el lomo. Algunos de ellos son Dolores, Marusca, Scooby, Galha Torta, Galha Mole, Croba, Lata, Chinelo.

Pescador arrojando la red

Antiguamente los delfines residentes en este Río eran 80, actualmente son apenas 12, hay otros delfines que pasan por acá, pero son errantes y no saben de la cooperación que existe con los pescadores. Esta tremenda disminución de delfines se debe a varios factores, todos relacionados directamente con el ser humano. Metales pesados, estaño, hierro, manganesio entre otros, desechos que las industrias tiran al río en las ciudades que están varios kilómetros antes de su desembocadura. Los desechos cloacales de todas esas ciudades también causan una contaminación importante. No puedo no contarte esto, porque se sabe que todos los delfines están enfermos y que los que llegan a nacer, mueren sin llegar a ser adultos. Es triste, pero no puedo dejar de contartelo.

Restaurantes y lanchas

La contaminación auditiva también es tremenda, cuando estuve allí la cantidad de jet skies y lanchas que pasaron como si nada, fueron muchas. El sonido debajo del agua de tantos motores en un angosto río hace que los delfines tengan una alteración enorme con respecto a lo que fue hasta hace un tiempo atrás la desembocadura de este río. No me quiero poner pesimista, pero simplemente describo lo que averigüé, todos los ríos de Brasil en sus desembocaduras están altamente contaminados…
Acá les dejo el único video que trata del tema, está en portugués, si te interesa esta parte del artículo que es el lado oscuro, seguro te va a interesar verlo.

El lado positivo es que un legislador nacional presentó este año 2017, un proyecto para nombrar la desembocadura del Rio Tubarão, Capital Nacional de los Delfines Pescadores, un título que intenta promover la conservación del ecosistema. Es un sello muy atractivo a nivel turístico, pero es solo una credencial que rápidamente tiene que tener repercusión efectiva en decisiones concretas para disminuir la contaminación real del río. Para tomar valor de esta simple interacción entre delfines y los hombres, solo existe en otros dos lugares en el mundo en Mauritania en África y Mianmar en Asia.

Pescador y delfin de tahina

Una interacción muy frágil, extinguido este ecosistema, no puede ser recuperado. Ningún otro delfín de los que pasan esporadicamente por la zona saben de esta cooperación, una vez que se pierda va a ser para siempre. Ya veremos, el futuro lo va a decir por si mismo. Por lo pronto hay que cuidar a estos 12 delfines que quedan y si te atrae vivir la experiencia, no demores en venir a vivenciarla.

Pescadores con sus redes

Es un lugar muy lindo para visitar, en la margen norte, después de la desembocadura del río, los surfistas aprovechan la rompiente, para practicar un deporte nacional que congrega a gran parte de la juventud a estar sobre sus tablas en la cresta de las olas. Un ferry alejado una centenas de metros del lugar de pesca, te cruza al otro lado del río, donde hay varios restaurantes con vista a la actividad del otro lado. Si vas en auto, podes recorrer el litoral, hay playas muy bonitas y tranquilas.

Ferri al otro lado del rio

La comida en los restaurantes es muy buena, y el servicio es excelente, los brasileros son dueños de un carisma muy especial, nunca un grito, ni mala onda, son siempre dispuestos, amables y tienen un trato cordial en cualquier situación. Si andás por el sur de Brasil, te recomiendo que pases por Laguna, la actividad de los pescadores es durante todo el día, empiezan desde muy temprano en la mañana. Ellos poseen códigos internos que respetan, por ejemplo si un pescador tira la red y saca por lo menos un pescado, tiene que salir para que entre otro en su lugar. Reglas claras conservan la amistad.

Restaruantes en la otra margen de Laguna

Alejandro Avampini

5/5 - (1 voto)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *