Es oficial: la llegada de «El Niño» a Argentina ya es un hecho. Así lo confirmó el Servicio Meteorológico Nacional en Argentina: «Luego de varios meses de espera, el fenómeno finalmente se ha instalado en nuestra región y se declararon oficialmente las condiciones El Niño en Argentina«.
El informe mensual del Servicio Meteorológico Nacional, publicado el pasado viernes 1° de septiembre de 2023, informa oficialmente que estamos en condiciones de El Niño, ya que en las últimas semanas la temperatura del océano Pacífico se mantuvo por encima de la temperatura umbral para este fenómeno y la atmósfera comenzó a responder a ese calentamiento.
Por empezar, cabe destacar que el ENOS (El Niño-Oscilación del sur), conocido popularmente como “El Niño”, es un fenómeno climático natural que tiene una recurrencia de entre 2 y 7 años. Sus impactos en el clima son de escala global y varían según la región del planeta y la época del año en que el fenómeno se presente.
¿Cuáles serán los efectos de este fenómeno en el clima? ¿Qué implica esto para el país? En general, en las primaveras bajo la influencia de El Niño suele aumentar la frecuencia y la intensidad de las precipitaciones en gran parte del centro-este y norte argentino.
El fenómeno se registra especialmente en las provincias de Misiones, Corrientes y norte de Santa Fe. La región que nuclea a estas provincias se caracteriza por ser las que tienen mayor vinculación con el fenómeno de El Niño: de acuerdo a los datos históricos, de las 10 primaveras más lluviosas en esta región, 7 fueron en años con presencia de El Niño.
Estas estadísticas demuestran las implicancias que tiene el El Niño en las precipitaciones de la región, que generalmente se traduce en impactos tales como temporadas donde se incrementa el riesgo de inundaciones, crecidas de ríos, tormentas intensas, entre otros. Esto también afecta en la provincia de Buenos Aires, sur del Litoral y el noroeste de Patagonia.
En otras regiones de Argentina el fenómeno también trae consecuencias. Un panorama completamente opuesto al anterior se observa en el oeste de la Pampa Húmeda, donde en las primaveras con El Niño predominan lluvias inferiores a las normales.