Con un mundo que lamentablemente sufre cada día más el cambio climático, la mayoría de los países se vuelcan de ca poco a fuentes de energía renovables. Una de las opciones más populares entre estas alternativas más sostenibles es la energía eólica. En lugares como Dinamarca, donde, en 2019, más de la mitad de su electricidad se generó a partir de energía eólica y solar, las turbinas eólicas imponentes se han convertido en un elemento familiar del paisaje nativo.
Sin embargo, todavía existen pros y contras de la energía eólica, y en los últimos años se han sacado a la luz algunas de sus desventajas. El mayor problema es el reciclaje de palas de aerogeneradores fuera de servicio. Debido a la fuerza que requieren las turbinas eólicas para funcionar correctamente, las palas están fabricadas con un compuesto de materiales como fibras de vidrio, resinas y espumas, sustancias que generalmente no son biodegradables y, por lo tanto, muy difíciles de reciclar.
Con una vida útil estimada de 20 años, una gran cantidad de palas de turbinas eólicas deberá retirarse pronto. De hecho, en general se estima que para 2050 habrá casi 40 millones de toneladas de material de desecho de la industria eólica mundial que deberán eliminarse. Pero la buena noticia es que hay varias empresas y grupos de investigación que buscan encontrar formas más sostenibles de reciclar y reutilizar palas de turbinas eólicas fuera de servicio.
Uno de ellos es The Re-Wind Network. Ya han comenzado a reutilizar algunas cuchillas desechadas como garajes para bicicletas en Dinamarca. El equipo de investigadores también está buscando formas de reciclar las palas de las turbinas eólicas como elementos arquitectónicos para mejorar la infraestructura. Algunas de sus ideas incluyen el uso de las palas para construir pasarelas peatonales, parques de patinaje y barreras acústicas para el tráfico de carreteras y autopistas.
«Estamos explorando la reutilización potencial de las hojas en la arquitectura y la ingeniería», dice Lawrence C. Bank del Instituto de Tecnología de Georgia, una de las instituciones líderes involucradas en el estudio. «El desarrollo de tales métodos puede tener un efecto positivo en la calidad del aire y la calidad del agua al disminuir una fuente importante de desechos no biodegradables».
Además de estos esfuerzos de reutilización, algunas empresas están encontrando formas de diseñar palas de turbinas eólicas que puedan desecharse de manera más eficiente y sostenible. Una empresa líder en energías renovables, Siemens Gamesa, encabeza este esfuerzo con el desarrollo y lanzamiento de la «primera pala de aerogenerador reciclable del mundo para uso comercial». Estas hojas están hechas de un nuevo tipo de resina cuya estructura química hace que sea más fácil de romper y separar de los otros componentes de la hoja para que pueda reciclarse.
Pero por ahora, imaginar turbinas eólicas reutilizadas como elementos de los paisajes urbanos también parece una solución muy buena. Desplácese hacia abajo para ver más imágenes de los garajes de bicicletas de turbinas eólicas creativas de Dinamarca.