Sucedió en el océano Pacífico. Como en un filme de ciencia ficción, o una novela de Julio Verne, un buzo estuvo entre los tentáculos de un gran animal de los mares, a 12 metros de profundidad.
Se hizo viral la historia y las imágenes de un buzo que estuvo a punto de morir por el ataque de un pulpo. El acontecimiento ocurrio a 12 metros de profundidad, una distancia poco usual para estos animales que suele estar en lo más hondo del océano.
A pesar de existir muchas especulaciones acerca de los pulpos, la ciencia ficción se refiere a ellos como ejemplares colosales. El afamado escritor Julio Verne, en su novela “Veinte mil leguas de viaje submarino” (1870) describe un pulpo del tamaño de un barco.
Pero en la vida real, el espécimen de más tamaño es el conocido popularmente como “pulpo gigante del Pacífico” [nombre científico Enteroctopus dofleini]. Se caracteriza por ser un cefalópodo, cuyo ejemplar más grande avistado alcanza los 9 metros de largo.
No obstante, en promedio estos pulpos alcanzan la extensión de 4,5 metros. Es un animal inteligente, que tiene una expectativa de vida de 4 años. En general, los pulpos no tienen una vida muy extensa, mueren luego de procrear.
Los protagonistas de esta historia se llaman Michael Marcotte y Stuart Seldon; ellos exploraban el mar y se llevaron una sorpresa. Este par de buzos se toparon con un ejemplar de Enteroctopus dofleini y fue cuanto menos amistoso.
“Cuando Stuart comenzó a tomar las fotos, el pulpo saltó sobre su cámara y envolvió algunos de sus tentáculos alrededor del cuello, las extremidades y el torso de Stu”, dijo su compañero en un video compartido en Facebook.
Fueron momentos de desconcierto, ya que el pulpo había atrapado a Stuart Seldon. Lo soltó, pero no para irse: ahora se lanzaba contra el otro buzo. Intentaba arrebatar la cámara de video submarina, evidentemente era algo que le llamaba la atención.
“Mientras filmaba el movimiento de esta bestia marina, comenzó a interesarse en mi GoPro [cámara]… casi intentando arrebatármela de las manos, pero tal vez ya había tenido suficiente cámara por el momento”
Luego de lanzar sus tentáculos, dejó en paz al otro buzo y se marchó. Por su parte, el que había sido atrapado entre los tentáculos quedó asustado. Cuando regresaron a la superficie, vieron el video de la extraña experiencia.
El tamaño del pulpo contrastaba con el de los buzos. La repentina agresividad del animal fue breve, pero pudo quedar grabada. Algo que sucede muy pocas veces.