A finales de julio, se podrá disfrutar del eclipse lunar más largo – o Blood Moon – del siglo. Comenzará durante la tarde del 27 de julio y entrando en la madrugada del 28 de julio, la Tierra pasará entre el Sol y la Luna, proyectando una enorme sombra roja sobre la superficie lunar.
La sombra es roja porque, mientras que la Tierra bloquea la luz del Sol para que no llegue a la Luna, la única luz que se refleja en la superficie lunar ha sido refractada por la atmósfera rica en nitrógeno de la Tierra.
Debido a un fenómeno científico conocido como dispersión de Rayleigh, el mismo mecanismo que hace que el cielo azul y los atardeceres rojos, la luz refractada por la Tierra se ve roja.
Durante un eclipse lunar total, lo que estamos viendo es la luz refractada de la puesta del sol del amanecer y del atardecer que se devuelve a nosotros. Dependiendo de la posición de la Luna en relación con la Tierra, la sombra puede tomar una variedad de colores, desde un rojo cobre intenso hasta un naranja vibrante.
Tenemos una mala noticia para los que viven en América del Norte, no lo podrán ver en vivo y en directo. Y los que viven en Asia oriental, Europa y Australia tendrán un eclipse lunar parcial, donde la luna solo pasa en parte a través de la sombra de la Tierra.
Pero si estás en Oriente Medio, Asia central, la Antártida o el este de África, entonces podrás ver el eclipse lunar completo.
La luna estará completamente dentro de la sombra de la Tierra a las 19:30 UT y permanecerá allí durante 1 hora y 43 minutos completos antes de que comience a pasar.
Todo el evento terminará a las 23:28 UT, a principios del 28 de julio, dependiendo de dónde viva en el mundo.